Palacio Legislativo 06-11-2015 (Notilegis).-El presidente de la Comisión de Atención a Grupos Vulnerables, diputado Gustavo Madero Muñoz (PAN), aseguró que en México hay alrededor de 5.7 millones de personas con algún tipo de discapacidad, de las cuales 27 por ciento (un millón 539 mil) la padecen de carácter visual, y aún sufren discriminación, exclusión e injusticia.

Al participar en el Primer Encuentro Nacional de Usuarios de Perros de Asistencia, realizado en San Lázaro, indicó que el Congreso debe legislar para garantizar el derecho humano de acceso al transporte y a lugares públicos y privados, a personas con discapacidad, debilidad visual y de todas aquellas que requieran de la asistencia de un canino entrenado para ello.

Sostuvo que en México, desgraciadamente, no existe una cultura de respeto ni de reconocimiento pleno al derecho humano de las personas que requieren de un perro para poder trasladarse a un determinado lugar.

“Es inaceptable que en algunos restaurantes u otros lugares no permitan el acceso de los perros de asistencia; es una falta de cultura, de educación y del reconocimiento de ese derecho humano”, puntualizó.

Explicó que estos caninos no sólo pueden ser usados por personas invidentes o con debilidad visual, sino también por pacientes con diabetes y autismo, entre muchos otros.

Madero Muñoz pidió a la población no distraer a los perros de asistencia cuando se encuentren en la calle, en el transporte o en lugares públicos, ni tampoco ofrecerles comida, toda vez que están trabajando y, al llamar su atención, pueden provocar que cometan un error que pudiera ser grave para quien depende de ellos.

Sugirió realizar un padrón que dé a conocer las cifras reales de la población mexicana con discapacidad, debido a que “el censo actual está muy por debajo de la cifra real, si se compara con los niveles internacionales y con los que otros países registran”.

La diputada Kathia María Bolio Pinelo (PAN), secretaria de la comisión, se pronunció por luchar desde esta instancia legislativa para garantizar la inclusión de personas con discapacidad a una vida digna.

“Trabajaremos por que los derechos de las personas con discapacidad sean respetados y la ley deje de ser letra muerta”, expresó.

Relató el caso de “Praya”, una perra guía que acompaña a su usuario y “amigo” Pepe; son un binomio inseparable y sincronizado que ha soportado discriminación por parte de choferes del transporte público que les niegan el ascenso, aseguró.

La diputada Sara Paola Galico Félix Díaz (PVEM), también secretaria de la comisión, aseguró que será labor del Legislativo, junto con el apoyo de sociedad civil, atender e impulsar una ley que regule el uso de perros para tareas y necesidades de este grupo poblacional.

El director general de Recursos Humanos de la Cámara de Diputados, Roberto Khalil Jalil, pidió difundir este encuentro, porque, consideró, hay poco conocimiento de los perros guía por parte de la sociedad mexicana y de la ayuda que prestan a personas con discapacidades en su transitar por la vida.

Declaró que éste debe ser el primero de muchos encuentros nacionales donde se intercambien conocimientos que ayuden a avanzar a marcos normativos que mejoren lo que hoy en día se conoce sobre los perros de asistencia.

“Falta mucha cultura de lo que pueden lograr. Hay perros de alerta sobre situaciones de gravedad, que pueden avisar a las personas sobre enfermedades o con posibilidades de infarto”.

El secretario general del Sindicato de Trabajadores de la Cámara de Diputados, Jesús Almanza Ontiveros, reconoció que para algunas personas los perros se han convertido en sus ojos, oídos y guías. “Hoy nos adentraremos a su mundo y su relación”.

Precisó que existen diferentes tipos de perros de asistencia como los guías para invidentes; de servicio, para quienes están en sillas de ruedas o que padecen de discapacidad auditiva, y de aviso o de alerta, para personas con epilepsia o diabetes.

“El can ha sido un aliado de la sociedad que subsana la discapacidad de sus amigos los humanos”, subrayó.

En su turno, José Iván Caballero “Pepe”, usuario de “Praya” –una canina de tres años de edad y adiestrada como perro guía- con lenguaje de señas dio la bienvenida al evento.

“Es una reunión soñada por mí, doy las gracias a los maestros y especialmente a los ponentes, ya que ellos se han tomado su tiempo y nos han dado su amor para apoyarnos”, expresó.

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