Palacio Legislativo, 30-11-2015 (Notilegis).- El salario mínimo debe ser una herramienta clave para fortalecer la economía familiar y hacer frente a la tendencia negativa en materia de política laboral, que en las últimas décadas ha colocado a México entre los países con peores salarios a nivel internacional, afirmó la diputada Arlette Muñoz Cervantes (PAN). Por ello –agregó- el gobierno de la República está obligado a dejar atrás políticas de moderación salarial, que sólo han restado poder adquisitivo a los trabajadores. La Comisión Nacional de Salarios Mínimos (Conasami) se instará en sesión permanente a partir del 1 de diciembre para analizar el incremento que se otorgará para el año 2016. El Congreso de la Unión aprobó el pasado 19 de noviembre la desindexación del salario mínimo a multas y recargos y turnó la reforma constitucional a los congresos de los estados para su eventual ratificación, ya que requiere del aval de la mayoría para su entrada en vigor. En un comunicado, la diputada del PAN consideró urgente dejar atrás los incrementos menores al salario mínimo, “que han tenido lugar durante los últimos cuatro años”. Precisó que de 2012 a 2015, el salario mínimo para la zona geográfica A sólo registró un incremento de entre 2.43 y 2.82 pesos, es decir, un máximo de 4.0 por ciento anual. Comentó que dicho ingreso sigue siendo insuficiente para brindar a millones de mexicanos la capacidad de superar la línea de pobreza por ingreso y tener acceso pleno a los productos de la canasta básica, así como a otros servicios que abonan al bienestar social, ello a pesar de que en septiembre pasado se logró la homologación de la cifra a 70.10 pesos para todo el país. “De acuerdo a la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) la canasta básica fluctúa alrededor de los dos mil 710 pesos”, explicó. El Consejo Nacional de Evaluación de Política de Desarrollo Social (Coneval) señaló que la suma de la canasta alimentaria y la no alimentaria, que incluye aspectos de bienestar, como el gasto de transporte público, los enseres domésticos y el acceso a la cultura, suma la cantidad de dos mil 518 pesos en las zonas urbanas”, enfatizó. Muñoz Cervantes añadió que “esto nos deja ver que el salario mínimo, que al mes asciende a dos mil 103 pesos, ni siquiera es suficiente para cubrir los productos de alimentación y servicios básicos que contribuyen con el bienestar de nuestra sociedad”. La legisladora por Aguascalientes destacó por ello que la Conasami tiene la obligación de buscar un incremento sustancial en este rubro, que en combinación con la oferta de empleo, fortalezca la capacidad adquisitiva de las familias mexicanas. Expuso que de acuerdo al Informe Mundial sobre salarios mínimos 2015 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), México y Brasil son dos de las economías emergentes que se han mantenido estancadas en materia de incremento al salario en los últimos años. Expresó que no resulta extraño que el país ocupe las últimas posiciones en Latinoamérica, en materia de salario mínimo, de acuerdo a los rankings de organismos como la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) y el Banco Mundial. “Nuestro país firmó en 2008 la Declaración sobre la Justicia Social para una Globalización Equitativa, junto con el resto de los miembros de la OIT. Estamos por ello comprometidos a reforzar las políticas laborales que vayan en la ruta de fortalecer el salario de los trabajadores mexicanos y alcanzar una mejor distribución de los ingresos”, puntualizó. La diputada aseveró que para el PAN, éste es un tema prioritario que se ha venido impulsando de manera firme, por ser un compromiso asumido con la ciudadanía desde los periodos de campaña y aseguró su grupo parlamentario seguirá trabajando en la ruta de fortalecer la economía de las familias. RZJ/JGM |