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Palacio Legislativo, 04-03-2016 (Notilegis).- La oratoria y la función pública nacen y transitan por el camino de la política, juntas, afirmó el presidente de la Cámara de Diputados, Jesús Zambrano Grijalva, al participar en la celebración, por primera vez en el país, del Día Nacional de la Oratoria, en el Palacio de Bellas Artes. “En la antigüedad, la enseñanza de la oratoria estaba destinada a las clases gobernantes. Actualmente celebramos que ya no sea así, y con la instauración del primer viernes de cada marzo como el ´Día Nacional de la Oratoria´, la anterior Legislatura le da la importancia merecida a este arte”, indicó. El diputado presidente resaltó la importancia de que la oratoria debería tener en la educación de los jóvenes en México. Dijo que el veracruzano Guillermo Héctor Zúñiga Martínez la presentó “como la herramienta idónea de los jóvenes para expresar sus ideas y generar los tan ansiados cambios que el país requiere”. Planteó tener en cuenta “que las ideas crean nuevos paradigmas, pero la forma en que las comunicamos debería de ser tal, que sea elocuente y –a la vez- seduzcan a la audiencia”. Al inicio de su mensaje, Zambrano Grijalva calificó la oratoria, como “un arte inexpugnable, eternamente perfectible, que se instituye como el mejor instrumento de cambio, como generador de paradigmas, como medio de locución no etéreo capaz de transformar una idea en una realidad”. “Es -sin menoscabo de la política- la oratoria la que engendra a la democracia, dotando al ser humano de las armas necesarias para expresar, debatir, defender, convencer y afirmar su ideología, su forma de pensar y la manera en que éste se relaciona con los demás”, agregó. Al hacer un recuento histórico, enfatizó que “desde los albores de la democracia en Siracusa, alrededor del siglo V a.C. y su posterior exportación a la ilustre Grecia helénica, surgen de la mano la oratoria y la política”. En México, apuntó, “grandes oradores se atrevieron a levantar la voz en épocas tan complicadas, agitadas y nutren nuestra identidad nacional, tales como: Servando Teresa de Mier, Miguel Ramos Arizpe, Andrés Quintana Roo, Valentín Gómez Farías”. Recordó que sus nombres están consagrados en letras de oro en el salón del Pleno de la Cámara de Diputados. “Carlos María de Bustamante, José Hipólito Odoardo, Lorenzo de Zavala, Manuel Gómez Pedraza, Guillermo Prieto entre muchos otros ilustres mexicanos, todos, que si bien se distinguen por haber sido excelentes oradores, también lo hacen por haber sido magníficos servidores públicos”, aseveró. JGM |
