Palacio Legislativo, 23-03-2016 (Notilegis).- La diputada María Eugenia Ocampo Bedolla (NA) impulsa una iniciativa que reforma la Ley de Hidrocarburos, para que las empresas que hayan sido responsables por daño en materia ambiental y/o patrimonial, no puedan participar en licitaciones de proyectos de extracción. En un comunicado, la legisladora subrayó la importancia de incorporar en la Ley instrumentos jurídicos que establezcan un sistema de prevención y responsabilidad, que permita reducir las posibilidades de que ocurra contaminación por derrame de hidrocarburos. A partir de la reforma energética, en México se cuenta con un nuevo régimen que permite la participación privada en la extracción de hidrocarburos, recordó la también secretaria de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados. Sin embargo, dijo, “es nuestra obligación como representantes populares, velar porque las empresas que participen en este sector, no cuenten con un mal historial de daño ambiental a nivel nacional o internacional”. Resaltó que si bien la legislación en materia de protección ambiental, prevé sanciones a aquellos responsables de los desastres naturales que dañan la biodiversidad, es necesario ir más allá y legislar para prevenir. Para ello, presentó una iniciativa para que “mediante la legislación se establezca como requisito ineludible que las empresas que deseen participar en las licitaciones de proyectos de extracción de hidrocarburos no hayan tenido antecedentes de accidentes, por negligencia o falta de capacidad atribuida a las mismas”. Ocampo Bedolla señaló que la explotación y transporte de petróleo son las principales fuentes de contaminación, sobre todo en ríos, mares y océanos, pues aproximadamente el 60 por ciento de la producción mundial se transporta por vía marítima. Además, se estima que tres mil 800 millones de litros de hidrocarburos entran cada año a los océanos, como resultado de las actividades humanas. Entre los más graves desastres ambientales, agregó, se encuentran los derrames de petróleo, que provocan grandes daños a los ecosistemas y a la salud humana, con las consecuentes afectaciones socioeconómicas. Por lo anterior, expusó, proteger el patrimonio, la salud y el derecho humano de todos los mexicanos a un medio ambiente sano, es una responsabilidad que asumen en Nueva Alianza y están dispuestos a crear las condiciones para ello. JGM |