Palacio Legislativo, 25-10-2016 (Notilegis).- La producción de petróleo estimada para elaborar el Presupuesto de Egresos de la Federación 2017 es perfectamente alcanzable, pero a corto plazo no se ve una mejoría sustancial de su precio, afirmó ante diputados el titular de la Secretaría de Energía, Pedro Joaquín Coldwell. “No considero que la plataforma petrolera base del presupuesto de 2017 esté fuera de la realidad, es perfectamente alcanzable”, indicó en la ronda de preguntas y respuestas al comparecer ante la Comisión de Energía, en el marco de la glosa del IV Informe de Gobierno del Ejecutivo federal. Al responder otra pregunta, dijo que no se veía en el corto plazo una mejoría sustancial del precio del crudo. En el Paquete Económico para el ejercicio fiscal 2017 que el gobierno federal entregó al Congreso de la Unión el pasado 8 de septiembre, se consideró una producción de petróleo de un millón 928 mil barriles diarios, con un precio proyectado de 42 dólares por barril. Estos datos se modificaron durante la discusión de la Ley de Ingresos 2017 que la Cámara de Diputados aprobó la semana pasada y turnó al Senado para su análisis, al incrementar la producción petrolera en 19 mil barriles y quedar en un millón 947 mil. El funcionario federal estimó que en este año se podrá terminar con una producción petrolera de alrededor de 2.1 millones de barriles de crudo al día, si no se tiene alguna contingencia meteorológica en el Golfo de México, y expresó su confianza en que se pueda cumplir la meta del 2017, que es menor a la de 2016. A pregunta expresa comentó que la declinación en la producción de petróleo en México inició desde el 2004, con el agotamiento del yacimiento súper gigante de Cantarell, que representaba el 65 por ciento de la producción total en el país. Pedro Joaquín Coldwell precisó que en ese entonces la producción de crudo era de 3.4 millones de barriles diarios y Pemex era la tercera empresa productora en el mundo. La caída de la producción petrolera “nos anunció, que la era de los yacimientos súper gigantes, de bajos costos de extracción, se había agotado y que el 76 por ciento de nuestros recursos prospectivos estaban en yacimientos no convencionales, en aguas profundas y ultra profundas del Golfo de México”, añadió. Sostuvo que por esa razón se realizó la reforma energética, ya que el país necesitaba tecnología de punta y que el capital privado viniera a complementar al de Pemex, para acceder a esa riqueza petrolera. Aseveró que en ningún país del mundo el gobierno corre solo con todos “los gigantescos riesgos”, entre ellos financieros, que conlleva la explotación de hidrocarburos, particularmente en aguas profundas. Se le preguntó si había interés de compañías internacionales de invertir en proyectos de aguas profundas en México, a pesar del bajo precio del petróleo, ya que la mezcla mexicana ronda en alrededor de 42 dólares el barril. Respondió que los contratos petroleros son de largo plazo, a 25 y 30 años, y que la industria mundial en este sector no se maneja por los precios del día de hoy, sino con una perspectiva de largo plazo. “En consecuencia, el primer barril de petróleo comercial que saldría de la licitación que llevaremos a cabo el próximo 5 de diciembre, se estaría extrayendo a mediados o a finales del siguiente sexenio”, agregó. Precisó que toma entre siete y ocho años la exploración y luego la extracción en condiciones tan difíciles como son las aguas profundas y súper profundas de las aguas nacionales. JGM |