Palacio Legislativo 09-05-2018 (Notilegis).- La presidenta de la Comisión Especial De salud mental y drogas, María García Pérez (PAN), urgió la necesidad de contar con políticas públicas efectivas con enfoque de género, para el tratamiento de adicciones. De 2011 a 2016, el consumo de drogas ilegales en mujeres mexicanas, de12 a 17 años, registró un aumento de un 205 por ciento, afirmó durante la inauguración del foro “Mujeres hablando de adicciones”. La legisladora dijo que, de acuerdo datos de la Encuesta Nacional de Consumo de Drogas, Alcohol y Tabaco (Encodat), de 2016 a 2017 se duplicó el consumo de estas sustancias en la población femenina, particularmente en menores. Señaló que existe “un preocupante crecimiento en las cifras de consumo”, según la Encodat hubo un aumento de un 2.9 por ciento en 2011 a un 6.2 por ciento en 2016, en la población adolescente en general. García Pérez aseveró que sustancias adictivas tiene especial complejidad entre las mujeres, particularmente cuando son madres o esposas, por los obstáculos que se presentan al reconocer una adicción, como lo es perder la custodia de los hijos, ser estigmatizada, la discriminación y el rechazo social. A pesar de la serie de avances alcanzados en este campo, aseveró, existe una seria carencia de oportunidades para el tratamiento, como la falta de centros especializados, horarios flexibles y programas terapéuticos adaptados a las necesidades de las propias usuarias, sobre todo si se trata de mujeres embarazadas o madres de familia. Llamó a que se hagan políticas claras orientadas a favorecer el acceso y la atención a grupos en desventaja, como son las menores en situación de calle, las mujeres migrantes o en conflicto con la ley. También pidió que las instituciones educativas, en todos los grados, apliquen de manera sistemática programas preventivos y con fomento de la salud mental con enfoque de género. La directora general técnica normativa de la Comisión Nacional contra las Adicciones (Conadic), María José Martínez Ruiz, dijo que, de acuerdo con Encodat, en la población de 12 a 65 años, hubo un incremento del 1.5 por ciento (2011) al 2.7 por ciento (2016). “Hablamos de un incremento de 80 por ciento, mientras que en mujeres este incremento fue del 175 por ciento”, agregó. Indicó que los adolescentes varones consumidores representan un 3.4 por ciento y un 2.3 por ciento con mujeres, lo que demuestra que “la diferencia es cada vez menos marcada”. Estas cifras reflejan que el inicio del consumo comienza en edades cada vez más tempranas, por lo que es indispensable diseñar políticas públicas que realmente permitan contener y evitar este fenómeno, particularmente en población femenina. Enfatizó que el estigma social contribuyen a que la mujer no reconozca su adicción y eso provoca que se agrave el problema y se haga más severa, pues evitan solicitar tratamiento. Otra de las barreras es la comorbilidad psiquiátrica, es decir problemas de salud mental que enmascaran el consumo de drogas, lo que dificulta que el personal de salud lo detecte, precisó. Afirmó que desde la Conadic se está trabajando para que los programas contra las adicciones, ya sea ambulatorio y residencial, sean sensibles al género, capacitando al personal, pues reconoció que la gran mayoría de éstos “aún carecen de una perspectiva de género”. “Desde la Conadic reconocemos que la perspectiva de género debe de ser un elemento indispensable de todo programa, preventivo y rehabilitatorio. Y abogamos por continuar trabajando juntos, sociedad - gobierno, para brindar a las mujeres con problemas de consumo una recuperación digna y de calidad”, abundó. La atención del sector femenino “requiere de acciones directas y decididas, pues desafortunadamente, aún enfrentan vergüenza y estigma, que limitan su adecuada protección y tratamiento”, aseveró. RZJ/ FQA/JGM |