14-10-2014.- Durante la sesión de hoy, la Cámara de Diputados avaló reformas a la Ley General de Pesca y Acuacultura Sustentables, a fin de que el Programa Nacional de Pesca y Acuacultura contemple apoyos a los pescadores y acuacultores que se dediquen, de manera legal y sustentable, a la captura y al cultivo de los recursos pesqueros y acuícolas en aguas nacionales, tanto marinas como continentales.

La reforma, aprobada por unanimidad con 409 votos, adiciona una fracción XV al artículo 20 de dicha norma y fue remitida al Ejecutivo federal para sus efectos constitucionales.

El dictamen precisa en los artículos transitorios que el presente decreto entrará en vigor el 1 de enero de 2015 y que las erogaciones que deban realizarse estarán sujetas al presupuesto autorizado y se ejecutarán observando las prioridades que se establezcan en el Plan Nacional de Desarrollo, debiendo observar las disposiciones aplicables en materia presupuestaria a partir del Ejercicio Fiscal de 2015.

Al fundamentar el dictamen, el diputado Alfonso Inzunza Montoya (PRI), presidente de la Comisión de Pesca, destacó la importancia de estimular a los pescadores para que formalicen su actividad y cumplan con lo dispuesto en la ley, su reglamento y demás disposiciones jurídicas aplicables.

Con la reforma, dijo, se establece el apoyo a la productividad del sector pesquero y acuícola como un instrumento de incentivo de la productividad de los pescadores, “que en términos de justicia social y política merecen, y que contribuirá a abatir los rezagos en que se encuentra la pesca del país desde hace ya varios años”.

En ese sentido, agregó, “los apoyos directos habrán de convertirse en un instrumento presupuestal para los miles de familias que integran el sector social de la pesca y la acuacultura en México”.

En su participación, la diputada María Sanjuana Cerda Franco (Nueva Alianza) resaltó la importancia de estimular que los pescadores formalicen su actividad y cumplan con lo dispuesto en la ley, esto es que cuenten con un permiso o concesión para realizar la actividad y actualicen sus datos ante el Registro Nacional de Pesca y Acuacultura.

Consideró que promover la formalidad y apoyar a los pescadores con mejor capacidad productiva es una buena medida, porque la pesca y la acuacultura constituyen una fuente importante de alimentos a nivel mundial, contribuyen en la generación de empleos, proporcionan recreación, impulsan el comercio y generan en gran medida bienestar económico en los países que lo saben explotar de manera productiva y sustentable.

Por su parte, el diputado Héctor Hugo Roblero Gordillo (PT) señaló que es importante estimular a los pescadores para que formalicen su actividad, dejando de lado la ilicitud y cumplan con las disposiciones de la ley.

Mencionó que en el artículo Segundo transitorio se prevé, para dar cabal cumplimiento al decreto, se sujete al Presupuesto de Egresos de la Federación 2015, observando las disposiciones aplicables en materia presupuestaria, lo que consideró pertinente.

Por Movimiento Ciudadano, la diputada Zuleyma Huidobro González aclaró que su grupo parlamentario considera que el mejor proceso de desarrollo para las comunidades pesqueras es el que permite elevar la calidad de vida de los pescadores y sus familias.

Por ello, estimó necesario impulsar, a través de políticas públicas integrales, como este dictamen, a los pescadores que se dediquen de manera legal a la pesca y a la acuicultura, con más apoyos y programas, por la apremiante situación del sector, por lo que expresó su apoyo a la reforma.

El diputado Mario Francisco Guillén Guillén (PVEM) subrayó que la actividad pesquera constituye para nuestro país una forma de vida y subsistencia principalmente en las zonas costeras. Por ello, dijo, es necesario contar con los instrumentos normativos para regular la explotación racional de los recursos pesqueros y garantizar la sustentabilidad que definan las directrices y que lleven a reforzar técnicamente el marco conceptual contenido en esta legislación que es aplicable.

Por ello, se pronunció a favor de la reforma, ya que se fortalecen dichas actividades desde el marco normativo, lo cual dota de mayor certeza tanto a las autoridades como a la sociedad en general con la finalidad de crear conciencia respecto de la pesca y la acuacultura.

En tanto, la diputada Saraí Larisa León Montero (PRD) señaló que resulta una enorme paradoja que siendo México uno de los países con mayor extensión de litoral aproximada de 1.9 millones de kilómetros cuadrados y 300 millas náuticas de cuerpos de agua continentales, su producción pesquera sea proporcionalmente menor a las riquezas con las que cuenta.

Precisó que las reformas permitirán ampliar la oferta de productos pesqueros particularmente en el mercado interno, contribuyendo con ello a disminuir el precio final beneficiando a los consumidores y beneficiar al estrado de productores pesqueros de menos ingresos.

La diputada María Celia Urciel Castañeda (PAN) indicó que con esta modificación se propone el establecimiento de un programa de apoyos directos a la pesca y a la acuacultura, Propesca, similar al de Procampo para los campesinos y Progan para los ganaderos. “Se considera que este programa presenta una oportunidad para dignificar la pesca”.

Resaltó la importancia de la reforma para todos los pescadores y acuacultores de nuestro país y consideró que con ello se protegerá a aquellas familias que quedan desamparadas al sufrir de los efectos de fenómenos meteorológicos o de vedas.

Del PRI, la diputada Landy Margarita Berzunza Novelo comentó que proponer e implementar apoyos directos a la pesca y a la acuacultura ayudará a solventar las necesidades más apremiantes del sector pesquero y acuícola, con la finalidad de enfrentar los tiempos de escasa producción, de vedas, mareas rojas y temporadas de ciclones.

Por tal motivo, dijo, es acertado que se establezcan en la legislación en la materia apoyos a los pescadores que se encuentren en el Registro Nacional de Pesca y Acuacultura y que se dediquen de manera legal y sustentable a la captura y al cultivo de cualquiera de los recursos marinos en bahías, esteras, riveras, altamar y aguas continentales mexicanas.

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