• Coinciden PRI, PAN, PVEM y Nueva Alianza en dar continuidad a enmiendas aprobadas
• PRD, PT y Movimiento Ciudadano sostienen que reformas “no reportarán beneficio a la población”
• Bancadas exponen temas que priorizarán en Primer Periodo Ordinario del Tercer Año de Ejercicio de LXII Legislatura

01-09-2014.- Legisladores representantes de los grupos parlamentarios de la Cámara de Diputados y el Senado de la República manifestaron su posicionamiento respecto al ciclo de reformas estructurales discutidas y aprobadas por el Congreso de la Unión durante los dos primeros años de la LXII Legislatura.

En la apertura del Primer Periodo Ordinario del Tercer Año de Ejercicio, las fracciones parlamentarias del PRI, PAN, PVEM y Nueva Alianza sostuvieron que dichas enmiendas detonarán un desarrollo sustentable para México; empero, coincidieron en dar continuidad a este proceso legislativo para alcanzar las metas planteadas.

En contraste, las bancadas del PRD, PT y Movimiento Ciudadano acusaron que las reformas no reportarán beneficio para la ciudadanía y se pronunciaron por aprovechar el mecanismo de consulta popular para conocer el grado de aceptación de los avances legales entre los mexicanos.

Asimismo, los grupos parlamentarios dieron a conocer algunos de los temas que pondrán en la mesa de debate durante este nuevo Periodo Ordinario que inicia en el Congreso de la Unión.

El coordinador del grupo parlamentario del PRI, diputado Manlio Fabio Beltrones, afirmó que el Poder Legislativo ha mostrado estar a la altura del momento histórico del país, y el Congreso dio muestra de que al practicar la política democrática y construir desde la pluralidad, sí es posible llevar a México hacia un mejor futuro.

Al fijar su posicionamiento, sostuvo que ésta es una cámara hecha para el diálogo constructivo, no para la violencia de la descalificación discursiva; pensada para actualizar nuestra legalidad, no para custodiar dogmas y tabúes; hecha para representar nuestra diversidad y respetar decisiones del máximo consenso posible, lista para el debate de las ideas y la construcción de acuerdos que permitan avanzar y resolver los problemas.

Llamó a sus homólogos a no abandonar la práctica de la política, “pues desnaturalizaría el sentido de nuestra organización como República y sus tres Poderes. Abdicar a hacer política para entendernos y atendernos en nuestras preocupaciones, sería asumir una postura fácil e irresponsable al permitir que el Poder Ejecutivo o el Legislativo dejaran como única y no como última instancia al Poder Judicial en la definición de la legalidad”.

Dijo que estos dos años han demostrado que cuando se persevera en el ejercicio de la política, “comenzamos a darle un nuevo rostro a México, mediante la forma que mejor garantiza el cambio a largo plazo: crear nuevas leyes, perfeccionar las existentes y consolidar a las instituciones de la República”.

Reconoció la capacidad y voluntad negociadora de la mayoría de los legisladores para alcanzar acuerdos y concretar reformas, “pues la política, como arte de lo posible, implica construir, superar enconos y concretar. Lo que importa en política, son los resultados”.

El senador Héctor Larios Córdova (PAN) enfatizó que su partido ha participado con entusiasmo, generosidad y creatividad en todas las reformas. “Lo hicimos –explicó-, por obligación con México, sin cálculos políticos y sin mezquindad”. Recalcó que este Congreso, y particularmente el PAN, le ha dado al país las reformas que requiere y “ahora nos corresponde vigilar que el Presidente no las desperdicie”

Aclaró que para ellos no ha terminado el ciclo reformador y urge completar una reforma anticorrupción y concluir las leyes secundarias en materia de transparencia, “porque en esta administración se ha desmantelado el sistema de control que se ejercía a través de la Secretaría de la Función Pública” y ahora cada secretaría y dependencia “nombra a alguien de su confianza para que lo vigile y lo cuide”.

Precisó que otra de sus prioridades es corregir algunos de los graves errores de la última reforma fiscal, ya que “la desaparición del régimen de pequeños contribuyentes ha metido en zozobra a más de tres millones de mexicanos a quienes ahora se impusieron nuevas obligaciones como entregar por Internet su contabilidad y emitir facturas electrónicas”. Por ello, se pronunció por regresar al régimen de pequeños contribuyentes y eliminar la no deducibilidad total de las prestaciones de los trabajadores.

También, dijo, se debe realizar una reforma constitucional al artículo 123 para que exista un salario mínimo digno, ya que hoy existe un concepto que sólo es un índice para calcular multas, excepciones fiscales, subsidios y pagos de los créditos del Infonavit. “Queremos que exista expresamente en la Constitución la prohibición de utilizar el salario mínimo como referencia para cualquier tema que no sea remuneración de los trabajadores”.

A nombre del PRD, la senadora Dolores Padierna Luna resaltó que las izquierdas mexicanas unificadas por el interés nacional acudirán a su cita con la historia, y caminarán con un pueblo resuelto a mejorar sus condiciones de vida en una senda iluminada por tres luces deslumbrantes: a la “luz de la razón, de la justicia y de la verdad, marcharemos a la conquista definitiva de nuestro porvenir como un pueblo libre y fuerte”.

Apuntó que la patria es de todos, “no sólo de un puñado de grandes intereses. La nación no es botín de nadie, es nuestro espacio de convivencia”, por lo que llamó a defender la República, la democracia y la división de poderes.

Aseveró que la batalla contra la corrupción es esencial, no es un asunto cultural, es un problema de impunidad, la cual mata cualquier posibilidad de avance. Se pronunció también por el debate democrático.

Cuestionó los avances de las reformas laboral, educativa, financiera, de telecomunicaciones y energética; indicó que la consulta popular revertirá la reforma energética. Sostuvo que el 70 por ciento de los mexicanos reclaman mejores empleos y salarios, combatir la corrupción y resolver la inseguridad.

En su oportunidad, el diputado Ricardo Astudillo Suárez (PVEM) afirmó que gracias a las reformas estructurales, hoy el país cuenta con las herramientas suficientes para detonar y transitar hacia un verdadero desarrollo sustentable en los próximos años.

“La materialización de las reformas son producto de la convocatoria que el Ejecutivo hizo al Legislativo, la discusión y entendimiento entre fuerzas políticas que nos llevaron a alcanzar los consensos necesarios para dar al país un empuje modernizador”, indicó.

Aclaró que la conclusión del ciclo reformador no significa que haya terminado la labor de la LXII Legislatura porque aún hay temas de gran relevancia que abordarán. “Ahora es tiempo de asignar los recursos necesarios para que, tanto las instituciones de nueva creación como las ya existentes, comiencen a funcionar en el marco de los cambios realizados a partir del próximo año”, expresó.

En tanto, el coordinador del grupo parlamentario de Movimiento Ciudadano, Ricardo Monreal Ávila, afirmó que los ciudadanos no han sido beneficiados con las reformas en materia energética, telecomunicaciones, laboral, financiera, fiscal y de educación.

“La mayoría de la población rechaza y reprueba el conjunto de reforma estructurales. Si son supuestamente las mejores reformas de los últimos tiempos, ¿por qué no someterlas a la prueba de las urnas mediante la consulta popular?”, destacó.

También, criticó los nulos resultados de la Cruzada contra el Hambre porque ésta “no ha podido evitar que México sea el único país en donde la pobreza y la indigencia siguen creciendo. Ahora hay dos millones de nuevos pobres con todo y sus reformas estructurales”.

Monreal Ávila cuestionó por qué el gobierno federal no ha planteado propuestas específicas que busquen solucionar el desempleo, la inseguridad y la corrupción, los tres principales problemas que la ciudadanía padece.

En representación del PT, Magdalena del Socorro Núñez Monreal acusó que las reformas estructurales han afectado la democracia y, “al imponer la visión de una mayoría al margen de sus representados, se instaura un Estado que rebasa los límites sin consultar al pueblo”.

Su fracción parlamentaria, precisó, considera que las enmiendas ponen en riesgo los intereses jurídicos al restringir los derechos de los trabajadores a recibir utilidades, y el de los campesinos sobre la tenencia de sus tierras.

“Estamos atentos de la necesidad de modernizar a la sociedad, pero jamás alterando los principios fundamentales del pueblo y mucho menos poniendo en riesgo el territorio, la riqueza y los energéticos de los mexicanos”, señaló.

Ante ello, hizo un llamado para que durante el tercer año de la LXII Legislatura se impulse un debate serio en materia social para “coadyuvar en el respeto a los derechos humanos y alentar la igualdad”, con reformas a la vivienda, alimentación, al ámbito laboral, de educación, salud y medio ambiente, y a favor de grupos vulnerables.

La coordinadora parlamentaria de Nueva Alianza, María Sanjuana Cerda Franco, se pronunció porque el Congreso de la Unión recupere la confianza ciudadana, en virtud de que “existe una tendencia a criticar con intensidad al Poder Legislativo”.

La obligación de fortalecer esta institución, aclaró, haya su motivo en que es “pilar de la democracia representativa”, por lo que propuso iniciar dicha tarea transparentando los recursos de ambas cámaras y estableciendo mecanismos de rendición de cuentas para adquirir legitimidad frente a los mexicanos y los otros Poderes de la Unión.

Por otra parte, la diputada Cerda Franco sostuvo que sus correligionarios participaron de forma responsable, en términos institucionales, durante el proceso de reformas estructurales “que habrán de colocar a México en una nueva era”.

Empero, subrayó que ahora corresponde aplicar las enmiendas en un espíritu de la legalidad, y evitar que la resistencia termine por desvirtuarlas o limitarlas. “Lo que no podemos hacer, es permitir que se defrauden las expectativas de crecimiento y bienestar que generan las reformas”, enfatizó.

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