• En 10 años el presupuesto suma cerca de 20 o 25 billones de pesos, pero no se mejora la calidad de vida, afirma

• Sostiene que persisten problemas educativos, de empleo, pobreza y bajo crecimiento económico

• Presentan libro “Fiscalización, Transparencia y Rendición de Cuentas”, de la UEC

22-01-2015.- El presidente de la Comisión de Vigilancia de la Auditoría Superior de la Federación, diputado José Luis Muñoz Soria (PRD), afirmó que la tarea de los órganos de fiscalización “no sólo es salir a cazar delincuentes como si fueran policías”, también deben evaluar las políticas públicas para ver si tienen los resultados que requiere el país.

Durante la presentación del libro Fiscalización, Transparencia y Rendición de Cuentas, aseguró que “estamos perdiendo la oportunidad de que los órganos de fiscalización sean el soporte para la revisión de las políticas públicas y aun cuando es responsabilidad del Ejecutivo, se les debe dotar de esa facultad.

“Con los tiempos establecidos para recibir la cuenta pública y programar auditorías, estamos teniendo resultados un año y medio después de que se entrega la cuenta pública, cuando esos resultados debieran ser la base para distribuir el presupuesto del siguiente año”.

Sostuvo que los presupuestos de los últimos 10 años suman cerca de 20 o 25 billones de pesos, y cuestionó “¿qué se ha hecho con ese presupuesto, con esos recursos?”, ya que no se ve el mejoramiento del nivel de vida de la población. Hay problemas en la cuestión educativa, persiste una baja generación de empleos y el 60 por ciento de los habitantes está en condiciones de pobreza, además de que el crecimiento en el país promedia 2.3 por ciento.

El presupuesto nacional, abundó, es resultado del trabajo de la sociedad que paga sus impuestos, que produce y no ve un mejoramiento en su nivel de vida, y que a pesar de las denuncias, de las auditorías, de los resultados negativos, nada se castiga.

Durante el evento, Muñoz Soria expresó que el tema de la transparencia, la fiscalización y la rendición de cuentas es una materia pendiente del Legislativo mexicano.

Reconoció que el país tiene un gran problema de impunidad en todas las instancias de gobierno, “ejecutiva, judicial y legislativa”, y se pronunció por que los materiales que se exponen en el libro se retomen para avanzar en la solución de este problema.

Agregó que “no hay un aspecto que tenga mayores resentimientos de la sociedad como el de ver la forma en que se manejan los recursos, que son el resultado de su trabajo”.

Expresó que la situación del país preocupa a todos, “y nadie quisiera, estoy seguro, que al Gobierno de la República le vaya mal; al contrario, que le vaya bien y se refleje en la elevación del nivel de vida, que haya trabajo bien remunerado, que la educación mejore y que la salud se atienda. Por eso es necesaria la evaluación de las políticas públicas”.

Enseguida, el titular de la Unidad de Evaluación y Control (UEC) Alejandro Romero Gudiño, dijo que éste es un tema vigente, actual, en movimiento y en expansión por los retos y desafíos que presenta la rendición de cuentas y sus modalidades de la fiscalización y la transparencia.

Propuso que los temas presentados en esta publicación sean parte de una colección sucesiva que permita mantener actualizada la materia, difundirla y vincular la rendición de cuentas al control parlamentario.

Al dictar la conferencia magistral ¿A dónde nos llevan las propuestas de lucha contra la corrupción? ¿Quo Vadis, México?, el abogado Sergio Huacuja Betancourt resaltó la relevancia de constituir un marco eficiente y eficaz para combatir el flagelo de la corrupción.

“Es una labor titánica y faraónica, pero se ha dado el primer paso con mucha valentía; terminamos con el ornitorrinco jurídico que se había previsto con la creación de una Comisión Nacional de Lucha contra Corrupción que no tenía pies ni cabeza”.

Reconoció que por vez primera está aterrizado un proyecto muy claro con el rediseño interinstitucional, donde se aprovecharán las fortalezas existentes que no impactarán el presupuesto, sólo se redistribuyen competencias, subrayó.

Al realizar una comparación entre las propuestas gubernamentales, las del PRD y PAN, Huacuja Betancourt refirió que existe consenso en lo esencial y recomendó analizar las similitudes y las diferencias, para consolidar “el parteaguas” que representa el que los órganos de fiscalización tengan la facultad de sanción, avance importante que permite introducir en México en las mejores prácticas internacionales para sancionar.

Destacó el papel preponderante de los comités interinstitucional y ciudadano que se establecerá; sin embargo, subrayó la existencia de “una laguna” en el control interno relativo a conductas administrativas no graves. Recomendó dar un papel protagónico al comité ciudadano para aprovechar el acervo de las universidades y vincularlo con la experiencia de los académicos.

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