- Durante Foro Nacional en la materia, diputados y expertos coinciden en crear una ley que impulse este mercado
- Cofepris prohíbe uso de algunas especies; trasnacionales promueven su restricción, aseguran
03-08-2016.- Diputados y académicos se pronunciaron por crear una ley nacional que impulse el mercado de plantas medicinales y productos naturistas en México, ya que muchos de ellos, a pesar de ser endémicos y benéficos para la salud, son “menospreciados” o poco explotados, además de que enfrentan la presión de las farmacéuticas trasnacionales para prohibir su uso. Esto señalaron durante la realización del Primer Foro Nacional “Hacia la Construcción de una Política Pública Integral para el Aprovechamiento Sustentable de la Cadena Productiva de las Plantas Medicinales y Productos Naturistas en México”, organizado por diputados de la fracción parlamentaria de Movimiento Regeneración Nacional (Morena). La diputada Blanca Margarita Cuata Domínguez, principal promotora del encuentro, urgió a evaluar la cadena productiva de este mercado y darle una justa dimensión a sus necesidades, pues, aseguró, “por diversas causas está olvidado, como ocurre con otros”. Lamentó que en México se menosprecie el conocimiento ancestral que respalda la creación de medicinas a base de plantas medicinales y productos naturistas, ya que dicha sabiduría – a la que calificó como un bien público- “debería posicionarnos como una potencia internacional en el rubro”. En este sentido, insistió en escuchar las demandas legítimas del sector y proporcionarle un “modelo de pertenencia social”, así como un mecanismo de mejora continua para garantizarle calidad y mejor organización. Rocío Nahle García, coordinadora parlamentaria de Morena, coincidió en que la cultura ancestral mexicana se refleja en tradición herbolaria; sin embargo, acusó que sólo las transnacionales han hecho fortunas con las fórmulas milenarias. En este punto, el rector de la Universidad Autónoma Chapingo (UACh), José Barrales Domínguez, lamentó que las grandes empresas farmacéuticas promuevan la restricción de las plantas medicinales y que la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) también prohíba el uso de algunas especies en México, bajo el argumento de que “se debe tener cuidado” de sus efectos. “Todas las plantas deben tener cabida”, enfatizó, ya que “todas las del planeta tienen un uso”. En el caso de la mariguana, precisó que posee extraordinarios valores médicos que deben explorarse, debido a que se ha comprobado su eficacia para curar varios padecimientos. Se sumó a la propuesta de crear una ley que regule el uso de las plantas medicinales; las grandes empresas “tienen derecho de producir medicamentos”, pero el costo de estos es muy alto, al igual que el de los tratamientos en hospitales, y las plantas tradicionales pueden abonar a la prevención de males que impliquen grandes inversiones a futuro. Miles de plantas poseen propiedades curativas, pero no se aprovechan En una primera ronda de conferencias, especialistas insistieron en reflexionar sobre las plantas medicinales como bienes públicos empleados a lo largo de la historia de México, y cómo preservar las tradiciones que hacen posible generar estos conocimientos. De la Universidad Autónoma Metropolitana, Andrés Fierro Álvarez destacó que en el territorio nacional, dos terceras partes de la población confía en las plantas medicinales para curarse de diversos males. De 30 mil especies de flora que existen en México, tres mil son de uso medicinal y alrededor de 250 tipos se comercializan todos los días en los mercados. Pese a la relevancia de estos números, el especialista lamentó que ninguna institución, empresa u organización aproveche de manera integral los beneficios de las plantas medicinales, en sus aspectos etnobotánicos, ecológicos, fotoquímicos, farmacológicos y toxicológicos, además de su potencial para crear empresas. Por el contrario, las concesiones que otorga la Secretaría de Economía (SE) a empresas privadas para explotar los recursos naturales sin control ni regulación, provoca que se dañe el hábitat natural de este tipo de plantas, acusó por su parte Paul Hersch Martínez, del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH). El investigador sostuvo que, particularmente, la Ley Minera es “anticonstitucional”, ya que al permitir las actividades de industrias extractivas indiscriminadamente, se afecta la flora y fauna de diversas regiones del país. Destacó que la falta de control en la venta de pesticidas, pone en riesgo la biodiversidad del país. De la UACh, el doctor Jesús Axcayacatl Cuevas Sánchez expuso el tema Recursos Fitogenéticos Medicinales en México y resaltó la necesidad de que éste sea un sector, no sólo productivo y competitivo, sino sustentable, ecológica y culturalmente. “Si sólo se piensa como negocio, las cosas no van a funcionar”, advirtió. De más de 30 mil especies vegetales, 25 mil pueden ser importantes recursos como medicinas, afirmó. Planteó dar seguimiento y certificación de los productos elaborados con estas plantas; definir un sistema de producción sustentable de especies curativas; promover su cultivo en el ámbito rural y urbano, e incluir en los programas educativos de todos los niveles, la importancia de conocerlas, conservarlas y mejorarlas genéticamente. Luis Vázquez Vázquez, médico tradicional mixteco, señaló que su labor tiene que ver con el conocimiento antiguo que no tiene validez, si no pasa por un cuerpo colegiado o académico. Se pronunció por una conveniente articulación de la cadena productiva para “recibir las ganancias de los transformadores y comerciantes, que venden el conocimiento avalado por la historia de los pueblos”. Participó también Fausta Linares, curandera, quien mencionó la importancia de contar con recursos para acercar los conocimientos sobre medicina tradicional a más personas, en beneficio de su salud. -- ooOoo -- |