• Diputadas de los ocho grupos parlamentarios participan en el apartado de efemérides en la sesión del Pleno

26-11-2019.- Con motivo del “Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer”, diputadas de los ocho grupos parlamentarios que integran la LXIV Legislatura externaron sus posicionamientos y se pronunciaron por erradicar este problema.

En el apartado de Efemérides, la diputada Mónica Bautista Rodríguez (PRD) señaló que las cifras de la violencia “son escandalosas”, ya que nos sitúan entre los 24 países más peligrosos para las mujeres en el mundo; del primero de enero al 30 de septiembre de este año se han cometido un millón 520 mil 779 delitos en contra de ellas. Se requiere de una política de Estado, para erradicar cualquier actitud de violencia, planteó.

En tanto, la diputada Nayeli Arlen Fernández Cruz (Morena) subrayó que la violencia de género se ha convertido en un problema estructural presente en todos los rincones del mundo, y mientras la falta de igualdad persista, seguirá formando parte de la cotidianidad social. Estimó que una de las claves para luchar contra este problema y avanzar en su prevención, es la educación y la respuesta adecuada de la justicia, para evitar la impunidad.

De Encuentro Social, la diputada Olga Patricia Sosa Ruiz se sumó a la lucha para acabar con el hostigamiento, acoso sexual y violencia; ratificó la postura de cero violencia en contra de las mujeres y ninguna tolerancia para quienes la ejercen. “Luchamos y legislamos día a día por erradicar la intimidación contra ellas a través de educación incluyente, cívica y humana. Otro México tolerante, más humano, respetuoso y aliado de las mujeres, es posible. Hagámoslo”.

La legisladora Geraldina Isabel Herrara Vega (MC) mencionó que un estudio realizado por la Unión Interparlamentaria, en 39 países de cinco regiones, el 82 por ciento de las parlamentarias declaró haber experimentado alguna forma de violencia psicológica con gestos, comentarios, imágenes de carácter sexista, de naturaleza sexual, degradante, amenazas y acoso laboral. Puntualizó que no se debe ver con naturalidad este lastre: “Es muy desafortunado mirar que la sociedad normaliza este fenómeno, por ello, seguiré promoviendo y respaldando cualquier esfuerzo que garantice una vida libre de violencia”.

Por el PT, la diputada Martha Huerta Hernández convocó a denunciar la violencia de género, lacra social que ha arruinado la vida de muchas niñas, adolescentes y mujeres. “No sólo basta indignarnos, tenemos la obligación de enfrentar estos aberrantes actos. No nos sentimos seguras”. El 64 por ciento de los casos de violencia ejercida por la pareja sentimental son agresiones severas. Cada mujer en esta situación perdió, al año, 30 días de trabajo remunerado y 28 días de actividades no remuneradas. El costo estimado, entre octubre de 2015 a 2016, ascendió a más de 4 mil millones de pesos, apuntó.

La diputada Lourdes Erika Sánchez Martínez (PRI) dijo que en México son asesinadas 3 mujeres por día y que en el mes de septiembre se reportaron 91 feminicidios, de los cuales 10 fueron menores de edad. La violencia tiene su origen en la injusticia, desigualdad, discriminación y en una sociedad omisa e insensible; por ello, debería de declararse la alerta de género en todo el país, así como visibilizar y destinar presupuesto a fin de fortalecer los centros de justicia para las mujeres y los observatorios.

La diputada Verónica María Sobrado Rodríguez (PAN) señaló que el desmantelamiento del sistema de cuidado para niñas y niños, es una modalidad de violencia. Precisó que es indispensable impulsar políticas públicas contundentes y presupuestos, “no sólo firma de acuerdos” para trazar la ruta que frene este fenómeno “que sigue proliferando”. Se pronunció por legislar en materia de violencia política y garantizar la participación femenina en la vida pública, fortalecer las alertas de violencia de género y aprobar la ley para prevenir, sancionar y erradicar el feminicidio.

En representación de Morena, la diputada Silvia Lorena Villavicencio Ayala conminó a garantizar una política pública acompañada de un marco normativo que prevenga y erradique la vulneración de los derechos no sólo de las mujeres, sino de las niñas y adolescentes. “Trabajemos juntas reconociéndonos entre nosotras y logremos por fin la igualdad sustantiva, la justicia y la pacificación de este país, a través de la erradicación de la violencia”.

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