El coordinador del PRD en la Cámara de Diputados, Silvano Aureoles, calificó la aprobación de la Ley Federal de Consulta Popular como un triunfo de la izquierda y sostuvo que dicho instrumento permitirá a los ciudadanos manifestarse a favor o en contra de cualquier tema de trascendencia nacional, incluida la reforma energética. Defendió así el voto de la mayoría de los diputados perredistas a favor del proyecto, aunque admitió que la nueva ley es perfectible. “La consulta popular es una bandera del PRD y de la izquierda, al igual que el referéndum, el plebiscito y la revocación del mandato; no podíamos oponernos a una ley, que si bien no es perfecta, es un avance muy importante en algo que para nosotros es fundamental: que en los temas relevantes para el país se pueda consultar a los ciudadanos”, subrayó. Aureoles advirtió que el PRD estará atento de que los alcances de la consulta popular a partir de 2015 tengan plena vinculación y haya voluntad política de los órganos del Estado mexicano para hacer, en su caso, las modificaciones a las leyes mandatadas por el pueblo. En un comunicado de prensa, el también presidente de la Junta de Coordinación Política de la Cámara de Diputados recordó que las modificaciones hechas por el Senado de la República a la Ley de Consulta Ciudadana cancelaron la posibilidad de que los promotores de las consultas hagan difusión en medios electrónicos, lo que a juicio de algunos limita los alcances del ejercicio. Sin embargo, dijo, que es preciso considerar que la consulta popular es un derecho que queda no sólo en manos de los ciudadanos, sino en la participación de los poderes de la Unión, lo que pone un ingrediente a los necesarios equilibrios que deben existir en el país. “Esta ley es una herramienta fundamental de la participación ciudadana. En circunstancias de menoscabo de la democracia representativa, es también una alternativa de la democracia directa”, agregó Aureoles. El legislador michoacano refirió que la consulta popular es también un instrumento para legitimar algunas acciones del gobierno federal en turno o consolidar la posición política de las facciones mayoritarias. Por ello, alertó, el uso de los medios de comunicación para la promoción de la consulta popular “debe ser responsable, escuchar el verdadero sentir popular y evitar distorsionar los propósitos”. Recordó que las consultas públicas podrán ser llevadas a la práctica cada tres años, el mismo día que se desarrolle la jornada electoral federal: contar con la consulta popular ha sido una demanda histórica de la izquierda y ha tenido un largo proceso de construcción, aunque todavía falta tiempo para hacerlo realidad, está pendiente su sanción y publicación en el Diario Oficial./arm/m |