|
La diputada Lilia Aguilar Gil, del Partido del Trabajo (PT), llamó a los legisladores del PRI, PAN y PRD a tomar decisiones incluyentes para aprobar las leyes secundarias de la reforma político-electoral. Recordó a estos a estos tres partidos que están velando por el derecho a voto y representación de todos los mexicanos; y que reformas electorales a modo se les han revertido en ocasiones anteriores, por lo cual deben tener cuidado, dijo, de complacer a grupos o intereses en esta reforma. “A pesar del sombrío panorama, las leyes secundarias de la reforma político-electoral constituyen una gran oportunidad para que los ciudadanos reconozcan a los legisladores como sus verdaderos representantes”, subrayó la vicecoordinadora de Contenidos de la Fraccion Parlamentaria del PT en el Palacio Legislativo de San Lázaro. Mencionó que los “berrinches” del PAN son el protagonista de la discusión de la reforma político-electoral, lo cual no ha permitido avanzar en el dictamen que elabora la colegisladora. Aguilar Gil señaló que “los argumentos para no haber avanzado en la votación de este documento tienen tono de ironía, ya que por un lado, grupos de panistas negocian con el gobierno y el PRD, y por otro, desconocen los acuerdos de sus correligionarios”. La discusión de la ley secundaria de esta reforma se ha transformado, dijo, “en un Frankenstein” que pretende, a través de pegotes e ideas sueltas, hacer tres leyes las cuales resuelvan problemas coyunturales a los tres partidos políticos que la están negociando. Subrayó que la clase política continúa edificando la desconfianza ciudadana, pues por un lado, el Partido Acción Nacional (PAN) pretende quedarse como primera minoría en las entidades federativas, quieren co-gobernar sin necesariamente haber ganado en las urnas. La diputada petista criticó también al PRD, quien aunque con una propuesta más progresista, quiere a través de su ley de partidos, poner orden en su organización interna al imponer reglas generales para todos, lo que significa una clara violación a la autodeterminación de los partidos. En tanto, el Revolucionario Institucional, dijo, trata de “pagarles” a sus aliados temporales, el PAN y el PRD, dándoles lo que no les lastima “tanto”: castigando un poco a sus gobernadores, pero centralizando la organización electoral. Mal hacen, consideró la petista, las cúpulas de los partidos tradicionales en continuar construyendo acuerdos con base en sus intereses y bajo la sombra de su poder./arm/m |
