Los diferentes objetivos planteados con la reforma en materia de telecomunicaciones se cumplirán en distintas etapas, ya que a partir del 1 de enero de 2015 las nuevas tarifas para telefonía deberán estar vigentes, con un impacto económico automático, señaló el legislador Juan Pablo Adame Alemán. El presidente de la Comisión Especial de Agenda Digital y Tecnologías de la Información de la Cámara de Diputados, mencionó que por otra parte deben de llevarse a cabo cambios socioeconómicos, educativos y de infraestructura al mediano y largo plazos. “No podría decirse que es una reforma exitosa si no tuviera un impacto directo en el bolsillo de todos y cada uno de los mexicanos”, sostuvo. Indicó que “las tecnologías de la información y la comunicación son una herramienta clave para facilitar el acceso de los mexicanos a la sociedad de la información y el conocimiento, con sus consecuentes beneficios en el incremento de la producción, el emprendimiento y la inclusión social, reduciendo la brecha digital. Para garantizarlo, comentó, era necesario lograr la reducción de los costos de los servicios de telecomunicaciones. El vocero de la fracción parlamentaria del PAN, dijo que en telefonía, con la eliminación del cobro por servicio de larga distancia se esperan ahorros anuales que van de los 19 mil millones de pesos a los 22 mil millones. Además, agregó, se recuperará en automático el saldo de prepago vencido al momento de una nueva recarga en teléfonos móviles y se podrá demandar a la empresa si no cumple con los estándares de calidad en las llamadas, quienes recibirán multas por hasta 10 por ciento de sus ingresos. Sostuvo que “se tendrá un más amplio y mejor servicio de telefonía celular, incluyendo la posibilidad de continuar con el mismo número telefónico y equipo, aún y cuando se cambie de compañía.” En lo que respecta a la televisión abierta, a través de la licitación de dos grupos de estaciones de televisión se podrá cubrir hasta 98 por ciento de la población del país, lo que garantiza una escala suficiente para promover la competencia en este sector, aseveró. Para dimensionar las nuevas inversiones que tendrá México con la certidumbre que dan las leyes secundarias en telecomunicaciones, recordó que el retraso en las mismas, que se esperaban para diciembre de 2013, generaron una pérdida en el sector de alrededor de 6 mil millones de pesos. Sobre los retos que enfrenta el Estado mexicano para cumplir al pie de la letra con los objetivos de la reforma, agregó, se encuentra extender la infraestructura de la red de telecomunicaciones aumentando de 20 mil a 50 mil kilómetros en tres años. México requiere, señaló, una red compartida interconectada a una red de fibra óptica troncal, que se traduce en proyectos que demandan inversiones cercanas a los 200 mil millones de pesos. Dentro de las metas de la reforma, se establece que se llevará el acceso a internet de banda ancha a escuelas, hospitales y edificios públicos, a través de una red pública del Estado, para conectar 250 mil sitios públicos, como escuelas, hospitales y edificios de gobierno. Hasta el momento, sólo hay 37 mil sitios y espacios públicos conectados. Adame Alemán recordó también que la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos diagnosticó para México una pérdida de bienestar de 129 mil 200 millones de dólares, que equivalen a 1.8 por ciento del Producto Interno Bruto, en el periodo 2005-2009 causada por las deficiencias en el mercado de telecomunicaciones./arm/m |