Diputados federales de diferentes fracciones legislativas se pronunciaron por llegar a acuerdos que permitan garantizar un presupuesto para el campo, acorde a las necesidades del sector agrario. En consideración de la presidenta de la Comisión de Reforma Agraria de la Cámara de Diputados, Gisela Raquel Mota Ocampo, es injustificado que de un ejercicio fiscal a otro disminuya el presupuesto para los programas agrarios. En la propuesta del Presupuesto de Egresos de la Federación para el campo de 2015 se observa una reducción en términos reales, por lo que la legisladora por Morelos del Partido de la Revolución Democrática (PRD) pidió que al menos se mantenga como está. Asimismo se pronunció por un acuerdo legislativo anteponiendo partidos e ideologías, a fin de diseñar un presupuesto multianual para proyectos específicos, ya que sólo así se sacará al agro de la postración. Cuestionó si con este presupuesto se logrará la transformación profunda que el campo necesita y las metas planteadas por el Ejecutivo federal sobre autosuficiencia alimentaria para 2018. “Es un momento oportuno para evaluar los requerimientos de los campesinos y lograr una “recomposición de la distribución en las diferentes partidas presupuestarias 2015. Será prioritario”, afirmó Mota Ocampo. En este contexto, llamó a un esfuerzo conjunto de los diputados para que, en coordinación con el Ejecutivo y las organizaciones agrarias, definan los recursos en apego a la realidad que viven los productores agrarios, para que lleguen a tiempo, se reduzcan los trámites burocráticos y se les apoye de manera transparente. Con motivo de la reforma energética, añadió, el trabajo de la Procuraduría Agraria se incrementará porque atenderá a los propietarios de tierras que puedan afectarse con la utilidad pública de sus terrenos y extracción de energéticos. Ello requiere por lo menos 200 millones de pesos adicionales para enfrentar este reto; no obstante, el aumento es sólo de 40 millones. La diputada federal perredista mencionó como ejemplo que el Programa Fondo para el Apoyo a Proyectos Productivos en Núcleos Agrarios (FAPPA) tiene un presupuesto insuficiente para 2015, con un alza de 23 millones de pesos, y menor en 270 millones al obtenido en 2013. Resaltó la marginalidad que mantiene la propuesta de gasto para alentar la igualdad de género, cuando la mujer tiene un rol cada vez más protagónico en el sector y la atención a los jóvenes rurales. En tanto, el Programa Especial Concurrente (PEC) tiene una reducción de seis mil millones de pesos y el área productiva del mismo, suma recursos menores a la inflación. A su vez, el diputado del PRD, José Antonio León Mendívil, calificó como grave la disminución de seis mil 511 millones de pesos para el campo en el proyecto del Presupuesto de Egresos de 2015 en relación a la del presente año, por lo que la bancada perredista impulsará un aumento de al menos 20 mil millones de pesos. La reforma estructural del agro, afirmó, es necesaria para elevar la vida de la población rural, garantizar la soberanía y la seguridad alimentaria, además de establecer mecanismos antimonopólicos que regulen los mercados agroalimentarios. En tanto, el diputado priista Óscar Bautista Villegas coincidió en la falta de más presupuesto para el campo y propuso un acuerdo entre diputados para impulsar “una nueva dimensión al presupuesto del gobierno de la República para el campo”. Además garantizó que la reforma estructural que requiere el campo no ha desaparecido, hay avances con el financiamiento a productores con tasas de un dígito para el área agrícola y pecuaria. También se pronunció por darle vitalidad al agro, pues por 12 años estuvo abandonado, pero “no lo podemos arreglar inmediatamente, estamos poniendo las bases fundamentales para darle vigencia al campo nacional”. Dicho argumento fue apoyado por el también priista Juan Manuel Rocha Piedra, quien dijo que “ningún legislador, sea del partido que sea, se va a oponer a etiquetar más recursos para el campo y enderezar el rumbo perdido con reformas estructurales, porque el dolor de los campesinos es el mismo”. Sin embargo, advirtió que no es fácil superar “los abismos y malos hábitos que prevalecen en el campo” y se comprometió a apoyar con su fracción legislativa un mejor presupuesto para el agro, ya que es una exigencia que requiere atenderse con toda la seriedad y oportunidad. Víctor Serralde Martínez, presidente de la Comisión de Desarrollo Rural legislativa, sostuvo que el tema agrario es prioritario y requiere mayor inversión. También se planteó que los diputados de los diferentes partidos deben buscar más recursos y romper el esquema de un presupuesto inercial a la baja para el agro nacional. Resaltó que el Fideicomiso Fondo Nacional de Fomento Ejidal (FIFONAFE), encargado de pagar a dueños de tierras rurales que resulten afectadas por el uso y explotación de energéticos en el marco de la recién aprobada Ley de Hidrocarburos, tiene “cero pesos para hacer sus funciones, lo cual es preocupante”. /gh/m |