Las bancadas del Partido Acción Nacional (PAN) y del Partido de la Revolución Democrática (PRD) en la Cámara de Diputados coincidieron en que los precriterios económicos rumbo al 2016, para la elaboración de un presupuesto con base cero, deben analizarse de la mano de expertos, académicos y especialistas. El coordinador del Sol Azteca, Miguel Alonso, demandó “abrir” esa discusión, pese a que tocará a la siguiente Legislatura aprobar el paquete económico para el año entrante. En particular, Alonso Raya aseveró que la propuesta previa de presupuesto para el año entrante, es más bien un nuevo plan de austeridad gubernamental, donde se pretende adelgazar el aparato administrativo federal. Al aseverar que el análisis debe ir más allá, hacia un cambio integral en la política fiscal donde se revisen los ingresos, el gasto y la deuda, el legislador consideró que el Ejecutivo tiene la oportunidad de replantear la política económica, sin privilegiar la “rentabilidad privada”, como ha ocurrido hasta el momento. Planteó que en un entorno donde el país se enfila a una crisis fiscal y cambiaria, se debe tener en cuenta que más del 70 por ciento de los recursos de los que dispone el Gobierno Federal están comprometidos en gastos como el pago de la nómina, deuda y pensiones. Ante tal situación, abundó, el único margen de maniobra que queda es el ajuste en los casi 900 programas presupuestales del Gobierno, donde muchos de ellos se han trastocado, no llegan a la población objetivo, algunos otros se duplican y en muchos más los recursos asignados no se han ejercido del modo correcto. La Secretaría de Hacienda, dijo el líder de los perredistas en San Lázaro, tiene que explicar al Congreso qué hará para enfrentar el panorama adverso y cómo piensa cubrir los aproximadamente 250 mil millones de pesos que no logrará captar por la vía de los ingresos petroleros, ello, a consecuencia de la caída de la producción petrolera y de los precios del crudo a nivel internacional. “El problema es que deberíamos abrir, pues una discusión, un debate responsable que permitiera la participación de especialistas, la revisión, la reflexión, la interlocución con los funcionario de hacienda encargados del diseño o el rediseño del presupuesto, para efectos de saber con toda claridad y con mayor precisión qué es lo que se pretende lograr con este presupuesto base cero. Qué se quiere atacar, que se quiere corregir”, refrendó. Por su parte, el coordinador del albiazul, Ricardo Anaya, señaló que corresponde a la actual Legislatura establecer las bases de la discusión presupuestal, y en especial a la oposición, en vista de que en las elecciones del 7 de junio, el Partido Revolucionario Institucional (PRI), perderá la mayoría en el Congreso y las condiciones para aprobar dicho paquete serán distintas a las que privaron en la saliente Legislatura. “Si de algo estamos convencidos y dan cuenta de ello prácticamente todas las encuestas publicadas, es que el PRI y sus aliados van a perder la mayoría en esta Cámara de Diputados, a partir de la siguiente Legislatura. De tal manera que esta discusión que se dará en septiembre y en los meses siguientes sobre el próximo Presupuesto, ocurrirá en condiciones muy distintas a las que hoy tenemos”, dijo. “Será la oposición la que tenga mayoría en la Cámara de Diputados, y estoy seguro, esto permitirá que sea aún más crítico el análisis y que verdaderamente podamos garantizar que cada peso incluido en el Presupuesto sea un peso bien gastado y de beneficio para la sociedad mexicana”, insistió Anaya Cortés. A su vez, el vicecoordinador panista, Marcelo Torres, recalcó que la Secretaría de Hacienda debe mostrar “humildad” y escuchar las voces críticas de especialistas y representantes de los sectores productivos. ys/m. |