|
Oscar Mario Beteta, conductor: Vamos al análisis que hace en este espacio la licenciada Carolina Viggiano. Carolina Viggiano, colaboradora: Muy buenos días, Oscar Mario. Hace unos días distintos medios de comunicación hicieron referencia a la declaración de un presunto delincuente que vinculaba a varias personas, entre ellas a mi compañero diputado Armando Luna Canales, con una supuesta red de lavado y de protección a favor de un miembro de la delincuencia organizada. Se trata de una investigación que se sigue en España, dentro de la cual se encuentran las declaraciones de algunos testigos protegidos, que además terminaron retractándose de su dicho. No obstante, se ha permitido que circule el nombre de una persona que ha tenido una trayectoria impecable en la administración pública y que hoy incluso preside la Comisión de Derechos Humanos en la Cámara de Diputados, donde ha demostrado su entrega por las causas de los derechos de los y las mexicanas. Desde hace varios años la delincuencia organizada se ha convertido en un verdadero problema por el daño que causa a la sociedad y a la economía, las formas cada vez más sofisticadas para delinquir en muchos años hacen más difícil el poder llevar a los delincuentes ante los tribunales. Esto llevó a crear mecanismos legales que facilitaban las investigaciones; uno de estos mecanismos son precisamente los testigos protegidos, que en México se usan desde el año 1997. No obstante, 19 años después su utilidad se ha puesto en duda en muchas ocasiones porque se ha usado como alternativa para evadir la responsabilidad de criminales a través de testimonios que no siempre se corroboran, pero sí llegan a causar un daño a la imagen e integridad de personas inocentes. Además de que la falsedad de la declaración ha provocado que muchos juicios se caigan, sin embargo algunos medios de comunicación, de manera irresponsable, retoman estas declaraciones sin tener mayor información o sin realizar la investigación que requiere una nota periodística. Es necesario que revaloremos la utilidad de esta figura y repensemos cómo debe usarse para evitar que se vuelva una vía de escape para la delincuencia con el visto bueno de las autoridades y que se afecte a la dignidad de las personas inocentes, generando con esto también mayor percepción de impunidad y dañando más la imagen de las personas. Soy su amiga Carolina Viggiano. Como siempre, le deseo a usted y a su familia una excelente semana. Duración: 02’ 42” bmj/m |
