Ante la propuesta de algunos legisladores de cancelar el Horario de Verano, el coordinador de los diputados del Partido Verde Ecologista de México (PVEM), Arturo Escobar y Vega, se pronunció por abrir un debate técnico para analizar a fondo las consecuencias de su posible cancelación.

De acuerdo con el mensaje de Escobar y Vega, este debate debe abrirse para analizar a fondo las consecuencias de la posible cancelación del horario de verano y evitar tomar una decisión política que podría generar otro tipo de consecuencias económicas o ambientales.

El pasado 21 de febrero, el Congreso de la Ciudad de México (CDMX) anunció que analizará una propuesta con punto de acuerdo para solicitar al Gobierno Federal que remueva los efectos al decreto que establece el horario de verano en México.

Por un lado, el de Movimiento Regeneración Nacional (Morena), el horario de verano es catalogado como causa de ‘consecuencias nocivas para la salud de la población, principalmente en las personas adultas mayores y niños, además de que no generan beneficios económicos o energéticos evidentes’.

El diputado del partido verde pide un debate técnico, pues consideró que el horario de verano genera ahorros, como uno de 1,311 millones de pesos en 2017, de acuerdo con un reporte conjunto del Fideicomiso para el Ahorro de Energía Eléctrica (Fide), la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y el Instituto Nacional de Electricidad y Energías Limpias (INEEL).

El congresista Carlos Castillo Pérez, de Morena, destacó ante el Congreso de la CDMX que la Comisión Europea llevó a cabo una encuesta sobre el tema en la que se determinó que los cambios generan cansancio, falta de concentración y estrés.

En dicha encuesta, más del 84 por ciento de los encuestados entre el 4 de julio y el 16 de agosto de 2018 dijeron estar en contra de cambiar el reloj.

Esta encuesta es un indicador de que el cambio de horario perturba el biorritmo natural de las personas y se convierte en factor de estrés e inconformidad en la población, y eso nos hace replantearnos su funcionalidad”, afirmó el diputado.

En México se estableció el horario de verano, que se aplica entre abril y octubre, a escala nacional en 1996. Antes sólo se aplicaba en el estado de Baja California Norte con las mismas fechas de inicio y final que Estados Unidos y Canadá.

En 2007, Estados Unidos y Canadá decidieron modificar las fechas de inicio y final, y México se negó a modificar las propias para hacerlas coincidir en ese entonces.

En 2010, el Congreso de la Unión en México decidió parchar el decreto, haciendo una franja fronteriza de 20 kilómetros, permitiendo que las fechas se modificaron únicamente en esa región.

Por la anterior razón, México es el único país del planeta que tiene dos diferentes aplicaciones del horario de verano. En el 2015, se propuso de nuevo que todo el país hiciera coincidir sus fechas para el horario de verano con EU y Canadá. La propuesta fue desechada en 2016. /psg/m