Debido a que Internet se ha convertido en la primera distribuidora de videos y fotos de pornografía infantil, la diputada Carmen Lucía Pérez Camarena impulsa reformas al artículo 202 del Código Penal Federal para que los proveedores de servicios de Internet coadyuven a contrarrestar el ilícito.

La secretaria de la Comisión de Derechos de la Niñez planteó que si algún proveedor descubre información que incluya material pornográfico que involucre a menores de 18 años de edad, lo denuncie a las autoridades correspondientes y, de no hacerlo, se le imponga pena de siete a 12 años de prisión y multa de 800 a dos mil días de salario.

Pérez Camarena explicó en entrevista que con esta reforma se podrá dar un paso importante contra los pedófilos, así como salvar millones de vidas de niñas, niños y adolescentes que se encuentran atrapados en las redes de la pornografía infantil.

De acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y el Buró Federal de Investigación (FBI), unos 750 mil pedófilos se encuentran en línea en todo momento, y derivado de las nuevas tecnologías, la niñez se encuentra más vulnerable que nunca.

Argumentó que la pornografía infantil es considerada como una de las peores aberraciones que la humanidad pueda tolerar, permitir u omitir, y es una conducta delictiva que va en crecimiento dado que produce miles de millones de dólares en el mundo, convirtiéndose en uno de los negocios más lucrativos.

Conforme al Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), tan sólo en 2006, de los 12.3 millones de personas que eran víctimas de trabajo forzoso en todo el mundo, 1.39 millones estaban involucradas en la prostitución infantil, y entre 40 y 50 por ciento eran niños y niñas.

La diputada expresó que avanza el problema de la pornografía infantil a través de Internet, pero cada día es más difícil para las autoridades de inteligencia policial detectar el delito, debido a que perfiles sin seguridad en Facebook o Twitter son la puerta para que pedófilos o pederastas accedan a las cuentas.

“El Whatsapp, Facebook y Twitter, entre otras redes sociales, difunden contenido que puede ser íntimo para la persona, pasando a ser público, y la nueva tendencia de tomarse fotos en actitudes provocadoras, semidesnudos o desnudos, no deberían ser compartidos”, recomendó.

Precisó que en lo que va del año, la Comisión Nacional de Seguridad, a través de la Policía Federal, ha detenido a algunos presuntos responsables del delito de producción y distribución de pornografía infantil, quienes administraban en redes sociales distintos perfiles de orientación pederasta.

Detalló que en el mundo existen programas diseñados para detectar el intercambio de archivos con posible contenido pornográfico, sin que éstos atenten contra la privacidad de las personas, pues trabajan con algoritmos, capaces de detectar imágenes en las que participan menores.

Pérez Camarena agregó que de acuerdo con la Fundación International Center For Missing & Exploited Children, México cubre cuatro de las cinco reglas que castiga y detecta la pornografía infantil a través de las redes sociales.

Sin embargo, añadió, en la actualidad los nuevos medios de contacto en Internet representan para los delincuentes la mejor manera de distribución y difusión para cometer actos ilícitos que generan ganancias millonarias. /gh/m