Reforma
14:46  |  17 - 07 - 2018
Critican legisladores plan de austeridad

Para legisladores de diversas fuerzas políticas, el Plan de Austeridad anunciado por el virtual Presidente electo de México, Andrés Manuel López Obrador, tiene vacíos legales, atenta contra los derechos humanos y laborales, y tiene incongruencias.

 

Jorge López Martín, vicecoordinador de Difusión y Mensaje de la bancada del PAN en la Cámara de Diputados, refirió que en esta etapa de transición las acciones de integrantes del gabinete han demostrado falta de preparación y planeación.

 

"Estamos ante una estrategia, anuncios que son desmentidos incluso por el Papa, entonces, pues no hay confianza, estamos incluso viendo que esta transición de López Obrador y su partido con una serie de mentiras que tienen desilusionada a la sociedad mexicana", expuso Martín.

 

Opinó que el proyecto de austeridad será sólo una pantalla y no tendrá buenos resultados, y que la idea de un plan de austeridad es plausible, pero no como lo está planteando el tabasqueño.

 

"Estamos viendo una serie de tropiezos, que están trastabillando cada declaración. Están dando palos de ciego ( ) sólo son buenos deseos, porque no han establecido con claridad cuáles serían los pasos a dar en términos legales, en términos financieros y en términos donde se pueda generar una confianza respecto de que estos buenos deseos se puedan hacer realidad", dijo.

 

"Estamos viendo simplemente el anuncio de buenas intenciones, pero carentes de acciones concretas y contundentes".

 

Los senadores priistas, Diva Gastélum y José María Tapia Franco, coincidieron en que un aspecto preocupante es el de los despidos masivos a trabajadores de confianza.

 

Gastélum reclamó que no ha habido una definición clara de quiénes serán los empleados que saldrán de la nómina gubernamental, y en dicha iniciativa, se podrían vulnerar los derechos laborales.

 

"Tendríamos que ver qué es un empleado de confianza, últimamente a mucha gente se le ha dado empleo de confianza porque no hay plazas, las plazas de los entes públicos están cerradas, entonces le llaman de confianza a una gente que tiene salario bajo, y que no tiene acceso a una plaza", apuntó.

 

"Tenemos que revisar minuciosamente cada caso, pero si deveras (sic) tenemos respeto a los derechos humanos, los derechos laborales son como la joya de la corona, los derechos laborales son algo que se ha ido consiguiendo () hay que ver repercusiones, hay que ver hasta dónde".

 

Al respecto, Tapia Franco refirió que se debe reflexionar en las repercusiones de estas modificaciones.

 

"No ha habido una propuesta clara de qué pasaría con las familias que trabajarían en dos instituciones diferentes, un matrimonio, uno en la SEP y uno en Salud y separaría familias. Qué pasaría por las guarderías para las madres que van a tener que irse a otros estados a trabajar, si existen las infraestructuras necesarias para atender a los menores en este tipo de instalaciones, guarderías", apuntó Tapia.

 

"Qué pasaría con la vivienda, qué pasaría con los créditos que fueron adquiridos para vivir en determinadas áreas geográficas y ahora cambiar su domicilio por cuestiones laborales. Todo eso creo que se tiene que analizar en conjunto y ver con un planteamiento integral y no solamente como un lineamiento propuesto, sino ver cuál va a ser realmente el método y el modelo de aplicación del nuevo Gobierno".

 

En tanto, el diputado perredista Agustín Basave indicó que, aunque apoya la idea de austeridad, existen diversos aspectos que deben aclararse o corregirse.

 

"En lo general me parece positivo. Hay mucha tela de dónde cortar. Habría que ver cómo le pega eso a la burocracia, porque si tú bajas al 50 o 60 por ciento el sueldo del Presidente, como lo anunció López Obrador, vas a bajar todo de ahí en adelante, y yo no sé hasta a dónde vas a llegar en el escalafón a los que no quieres perjudicar", expuso Basave.

 

"Habría que hacer un análisis más preciso () habría que evaluar punto por punto si no sale más caro el caldo que las albóndigas".

 

El proyecto de austeridad también fue criticado por el senador independiente Javier Lozano.

 

"Es muy importante que se mantenga la calidad de servicios públicos ( ) van muchos años que este País les ha invertido mucho dinero para que sean servidores públicos, unos de carrera, unos de nivel muy competitivo, y bueno pues cuidar que por ser muy competitivos, se los pirateen en el sector privado () al ver su salario reducido", apuntó.

 

"Un recorte muy fuerte de empleados, pues eso puede traer como consecuencia una presión adicional al mercado laboral y muchos de ellos son personas muy preparadas, muy especializadas en diversos campos, que no necesariamente van a encontrar un empleo acorde a su especialidad".

 

Por su parte, la senadora panista Laura Rojas reprochó a Andrés Manuel López Obrador que los planes de austeridad anunciados por el tabasqueño estigmaticen a los servidores públicos.

 

"A mí me preocupa seriamente que se esté generando una estigmatización de funcionarios públicos altamente calificados que no son de un partido político, que tienen mucho tiempo en la Administración pública y muchas dependencias, muchos de ellos que han ganado sus plazas por concurso, de lo que quedó del servicio profesional de carrera", observó Rojas.

 

La legisladora mexiquense anunció en entrevista que enviará una carta al ganador de la elección presidencial para sugerirle que la disminución de los salarios de los servidores públicos se haga de la mano de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) y de la Comisión Económica para América Latina y El Caribe (CEPAL).

 

"Tenemos una oportunidad auténtica para combatir los abusos y los excesos que ciertamente hay en la Administración pública, pero también hay que señalar que esa no es la gran corrupción -la gran corrupción es la que está en las licitaciones y en la obra pública- y ahí es donde se tiene que poner mucha más atención y terminar de construir el Sistema Nacional Anticorrupción", expuso.

 

"Yo voy a mandar una carta al futuro Presidente de la República para decirle que está bien hacer una revisión de los salarios y las prestaciones, pero que se haga de manera seria y que se haga de manera profesional para evitar dos cosas: que se nos vayan los buenos funcionarios, porque gobernar no es enchílame otra -se necesita gente especializada, capacitada, con formación y con experiencia- y para no incentivar la corrupción", detalló.

 

Rojas consideró que esa revisión debe hacerse de la mano de los organismos internacionales pues de eso depende el buen funcionamiento del gobierno.

 

"No lo puede hacer nada más porque se le ocurrió que todos tienen que ganar cuarenta mil pesos", concluyó. /gh/m