La Cámara de Diputados aprobó de última hora, prácticamente al cuarto para las doce y en votaciones atropelladas, con equívocos y rectificaciones, los nombramientos de los titulares de los órganos internos de control de organismos autónomos.

También entre reclamos de algunos congresistas, salió en nombramiento del titular de la Unidad de Evaluación y Control de la Comisión de Vigilancia de la Auditoría Superior de la Federación.

Por protestas de diputados del Movimiento de Regeneración Nacional, encabezada por los veracruzanos, la candidatura de la designada contralora de la Comisión Federal de Competencia Económica, se “cayó”.

A grito abierto y con cartones que presentaban una fotografía de Elizabeth Morales García acompañada del ahora ex gobernador de Veracruz y sujeto a proceso penal, Javier Duarte, los morenistas acusaron que la seleccionada está involucrada en investigaciones por irregularidades.

Al momento de votar en bloque ese nombramiento y el de los aspirantes a contralores del Instituto Nacional de Transparencia y del Instituto Federal de Telecomunicaciones, la mayoría frustró momentáneamente esas tres designaciones.

Antes de emitir votación, los opositores a Morales García pidieron a la presidenta de la Mesa Directiva en turno, Dolores Padierna, separar las votaciones.

Sin embargo, Padierna no accedió, con el argumento de que los tres nombramientos estaban contemplados en un solo acuerdo de la Junta de Coordinación.

Después de que allí se entramparan las designaciones en el INAI y el IFT y ya con el diputado Porfirio Muñoz Ledo al frente de la Directiva de San Lázaro, el procedimiento se repuso. Sin problema alguno, los nombres de quienes a la postre fueron electos contralores en Transparencia y Telecomunicaciones, se sometieron a votación por separado, como de inició se sugirió a la diputada Padierna Luna.

El nombramiento del titular de la Unidad de Evaluación y Control fue impugnado por el presidente de la Comisión de Transparencia, Óscar González, que, de paso, renunció al puesto y se confrontó con el presidente de la Mesa Directiva de San Lázaro, Porfirio Muñoz.

Al pedir el uso de la palabra, González Yáñez intercambió lances con Muñoz Ledo.

“No, no tienes por qué hacerte famoso”, “no hombre, escríbemelo”, le respondió el presidente de la Cámara al diputado González Yáñez, que exigió su derecho a utilizar la palabra.

“No seas grosero, mano”, le dijo al negarle reiteradamente el uso del micrófono. “Lo voy a hacer sufrir”, dijo Muñoz Ledo y en seguida le permitió intervenir.

“La verdad me gustaría agradecértelo, pero no”, le dijo González Yáñez al presidente, para después recalcar que la vida parlamentaria se rige por el honor, la ética y el respeto a los acuerdos, cosa que no sucedió con el titular de la Unidad de Evaluación.

Al denunciar la violación de acuerdos, el diputado por el Partido de Trabajo indicó que, en congruencia, declinaba su cargo en la Comisión de Transparencia “No se puede andar en un parlamento donde no se cumpla la palabra”, sentenció. /psg/m