En contexto. Cuenca Grijalva - Usumacinta: los beneficios y daños derivados de los escurrimientos y la gestión del agua
La cuenca del Grijalva-Usumacinta tiene una extensión territorial de 91,345 km2 y representa el 4.7% del territorio nacional; se encuentra ubicada en el sureste del país y administrativamente comprende los estados de Tabasco, Chiapas y pequeñas porciones de Campeche.[1]
Esta cuenca es considerada como una región de alta vulnerabilidad y de altos riesgos climáticos, ya que la región es frecuentemente afectada por huracanes que provienen tanto del océano Atlántico como del Pacífico, situación que genera precipitaciones torrenciales, deslaves y riesgos por inundaciones.[2]
[1] Instituto Nacional de Ecología y Cambio Climático, La cuenca de los ríos Grijalva y Usumacinta, tomado de http://www2.inecc.gob.mx/publicaciones2/libros/402/cuencas.html (consulta: febrero de 2021).
[2] Banco Interamericano de Desarrollo, Plan de adaptación, ordenamiento y manejo integral de las cuencas de los ríos Grijalva y Usumacinta (PAO), 2015, disponible en https://publications.iadb.org/publications/spanish/document/PAOM-Diagn%C3%B3stico-integrado-con-identificaci%C3%B3n-de-%C3%A1reas-prioritarias-Resumen-Ejecutivo.pdf (consulta: febrero de 2021).