Palacio Legislativo, 02-07-2015 (Notilegis).- El coordinador de los diputados del PRD, Miguel Alonso Raya, afirmó que el Ejecutivo federal debe discutir seriamente con los legisladores la metodología del Presupuesto Base Cero para el 2016, así como los posibles escenarios que se podrían derivar de este ejercicio.

“Hasta ahora la explicación y la información que se ha dado a los legisladores no es suficiente, se tendrían que plantear con mayor claridad al Congreso de la Unión las razones por las cuales se sustituyen o fusionan algunos programas”, dijo en un comunicado de prensa.

La Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) entregó a la Cámara de Diputados, el pasado martes, la estructura programática para el Presupuesto de Egresos 2016, con la que se sustentará el enfoque de Presupuesto Base Cero, y propone reducir en 22 por ciento el número de programas presupuestarios.

“Cualquier ajuste (a los programas) tiene que hacerse observando la ley … tiene sentido desaparecer programas que se dupliquen o que se hayan distorsionado, pero eso amerita una explicación de los motivos por los cuales se propone eliminarlos”, indicó Alonso Raya.

Comentó que la fusión o eliminación de programas tiene el riesgo de no derivar necesariamente en la reducción en el ejercicio del gasto, ni en su eficiencia, sino en una mayor opacidad que impida el pleno ejercicio de las facultades de los legisladores para analizar, discutir y aprobar el proyecto enviado por el Ejecutivo.

“Todo está por verse, revisarse y discutirse. La discusión, si es seria, debe iniciarse por el lado de los ingresos, no del gasto, a menos que la prioridad para (la Secretaría de) Hacienda sea recortar, fusionar, eliminar, resectorizar y compactar programas para profundizar la austeridad presupuestal”, expuso.

El legislador perredista subrayó que “los tiempos son cortos y, siendo realistas, es prácticamente imposible construir integralmente un nuevo Presupuesto Base Cero y una nueva estructura programática, menos si no se nos da la información completa”.

Bajo este escenario “el compromiso inmediato que se debe asumir es posibilitar una discusión amplia y seria sobre la política fiscal, vista integralmente, es decir, que se incorporen a la discusión los ingresos, los gastos y la deuda pública”, explicó.

Recordó que el Presupuesto Base Cero es sólo una estrategia presupuestaria más, que pretende reducir drásticamente el crecimiento del gasto, eliminando programas, con el fin de restablecer el equilibrio presupuestal.

“El gran reto del Poder Legislativo es cumplir con los compromisos de reorientar la política fiscal (ingresos, gasto y deuda), hacia un impulso real e inmediato al crecimiento de la economía; así como reducir los niveles de desigualdad y de pobreza”.

Agregó que la estructura programática que se propone “es sólo un nuevo catálogo de programas presupuestales, donde se eliminan 246 de ellos con criterios muy poco claros”.

Refirió que cualquier recorte, fusión, eliminación, resectorización o compactación del presupuesto, siempre tiene consecuencias políticas, económicas y sociales importantes, sobre todo “en un entorno de austeridad, con creciente desigualdad, exclusión social y crecimiento económico mediocre e insuficiente.

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