Nota N°. 803 | Anuncia Ojeda Anguiano iniciativa para crear figura de Presupuesto Democrático y que ciudadanía pueda decidir sobre al menos el 2.0 por ciento del gasto público |
Palacio Legislativo, 06-11-2015 (Notilegis).- El vicepresidente de la Cámara de Diputados, Alejandro Ojeda Anguiano (PRD), informó que el próximo martes presentará una iniciativa de reformas para crear la figura de Presupuesto Democrático, con la finalidad de que la ciudadanía pueda decidir sobre al menos el 2.0 por ciento del gasto público. El documento tiene el propósito de alentar una mayor participación ciudadana, indicó el legislador en un comunicado. Señaló que de aprobarse la iniciativa, cada año que se discuta el proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF), la Cámara de Diputados deberá someter a consideración del pueblo el 2.0 por ciento del total de esos recursos. Con ello se pretende que, mediante votación electrónica, se decida a qué programas sociales o de infraestructura se deberá dar prioridad en el ejercicio fiscal de que se trate. El legislador del PRD adelantó que en la iniciativa se contempla reformar el artículo 35, Fracción VIII, Numeral 3o. y se adiciona un último párrafo al artículo 74 de la Constitución Política, creándose la figura de Presupuesto Democrático. Comentó que los ciudadanos y la sociedad en su conjunto necesitan herramientas jurídicas para participar e incidir en las decisiones de autoridad, así como limitar y controlar el poder público. Dijo que es prioritario definir constitucionalmente la democracia participativa y deliberativa e incorporarla a la forma de gobierno de nuestro Estado mexicano. Opinó que la democracia representativa está llegando a su límite, por múltiples razones, entre ellas, la de que es un sistema que no representa a muchos sectores relevantes de la sociedad; es, además, un sistema en donde los gobernantes y gobernados se encuentran cada vez más alejados entre sí. De igual forma, mencionó,”es un sistema que no ha servido para moderar el poder –de pesos y contrapesos– sino para que otros poderes al margen del Estado colonicen y privaticen las instituciones; además, es un sistema que conduce a la parálisis y al vaciamiento de la democracia”. Expresó que este déficit democrático de representación popular efectiva ha generado consecuencias serias como la falta de participación de la sociedad en los procesos electorales (altos índices de abstencionismo) y en la toma de decisiones políticas. Lo anterior, abundó, nos conduce a admitir que la democracia representativa se ha consolidado a partir de una ciudadanía políticamente muy limitada, creándose una esfera burocrática y partidista que no toma en consideración dos elementos sumamente importantes de la misma, tanto lo social como lo económico. Por lo anterior, subrayó, esa forma de democracia debe ser trascendida para que la sociedad, que es la base de las instituciones, sea reconocida como ser actuante de la vida pública. Manifestó que extraña que, pese a la gran discusión a nivel mundial en materia de democracia participativa y su incorporación en una gran cantidad de países europeos y latinoamericanos, todavía no se incorpore en nuestro marco normativo como ejercicio de su soberanía. Además, explicó, aunque en la Constitución Política se reconoce que la soberanía nacional (artículo 39) y que todo el poder público reside en el pueblo, es de observar que en el texto constitucional sólo norme el ejercicio indirecto de esta soberanía y poder por medio de representantes, y no en forma directa, mediante la intervención (la participación) del pueblo soberano. Es por ello que, expuso, con gran frecuencia el ciudadano llega a pensar que cuando nombra a sus representantes, en realidad cede su soberanía y su poder público, que en lo sucesivo pasa a las manos de aquéllos a los cuales eligió dentro de nuestro sistema democrático, y tales ciudadanos soberanos pasan a ocupar el modesto puesto de gobernados. RED/JGM |