Palacio Legislativo, 06-09-2016 (Notilegis).- El coordinador de los diputados de MC, Clemente Castañeda Hoeflich, aseguró que su grupo parlamentario presentó este martes ante el Pleno de la Cámara de Diputados una iniciativa para reconocer en la Constitución Política los derechos de la naturaleza.

La propuesta adiciona un Título Décimo a la Constitución, porque estamos convencidos que el respeto y cuidado de la naturaleza tiene un efecto transversal en la salvaguarda y ejercicio de todos los derechos de los ciudadanos”, indicó en declaraciones a la prensa.

Detalló que esa iniciativa tiene cuatro objetivos fundamentales:

Primero, establecer obligaciones concretas para que el Estado y la población garanticen los derechos de la naturaleza, particularmente en su responsabilidad de mantener un equilibrio entre políticas de desarrollo y salvaguarda del medio ambiente.

Segundo, instaurar las bases para que el cuidado del suelo, aire, agua y biodiversidad, así como la preservación del patrimonio natural sean considerados como prioridades de interés público nacional.

Tercero, diseñar las bases para que los ciudadanos defiendan los derechos de la naturaleza y exijan la reparación del daño, “porque si ya reconocemos el derecho humano a un ambiente sano en el artículo cuarto, pues también es hora de dotar a los ciudadanos de las herramientas para defender este derecho”.

Cuarto, estipular que quien ocupe la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) sea ratificado por la Cámara de Diputados. “Nosotros decimos con ello que el propio Estado mexicano reconocería la importancia y la estatura de este ramo, incorporando mecanismos de control y de rendición de cuentas”.

También, explicó que los programas medioambientales son constantemente observados por la Auditoría Superior de la Federación (ASF) por malos manejos financieros y “hemos visto cómo se deteriora el medio ambiente: la calidad del aire, agua, suelo, los recursos y el patrimonio natural”.

Consideró que la política ambiental en México “ha estado secuestrada por un intercambio de favores de carácter partidista o particular y hemos dejado de lado cualquier política de Estado en materia ambiental”.

“Si hablamos de respeto a la vida y a los derechos, tenemos que hablar del respeto a la naturaleza”, aseveró Castañeda Hoeflich.

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