Nota N°. 5744 | Constitución de 1917 sigue siendo factor de estabilidad y seguridad nacional, que nos une y da identidad como nación: Bolaños Aguilar |
Palacio Legislativo, 01-02-2017 (Notilegis).- Los principios esenciales de la Constitución Política de 1917 establecieron el rumbo de México a lo largo del siglo XX y aun hoy, de lleno en el siglo XXI, lo siguen definiendo con fuerza y vigor, afirmó el presidente de la Cámara de Diputados, Javier Bolaños Aguilar.
“Sigue siendo factor de estabilidad y seguridad nacional. Es un referente histórico vivo que dicta aún el devenir de nuestro país. Hoy como antes, la Constitución nos une y nos da identidad como nación”, indicó durante la Sesión Solemne para conmemorar el centenario de la promulgación de la Carta Magna.
A pesar de sus muchas transformaciones, derivadas de la evolución histórica de la sociedad, la Constitución de 1917 continúa ofreciendo una vida institucional en términos políticos y jurídicos, para encauzar la transformación y el cambio social, apuntó.
Sostuvo que “como ciudadanos y legisladores de la República honramos la Constitución todos los días en el ejercicio de la representación política plural de la sociedad. Y como parte de este compromiso cotidiano debemos reflexionar sobre su alcance y contenidos en esta actualidad”.
A punto de conmemorar el centenario de su promulgación, el 5 de febrero, “es justo decir que ha experimentado una transformación tal que es conveniente y necesario hablar de un nuevo momento, un nuevo ciclo en la historia constitucional mexicana”.
“Si asumimos que representa el fundamento del acuerdo político que da cohesión a nuestra nación y que en ella debe plasmarse el proyecto social y de desarrollo del país, es por demás evidente, entonces, que la historia constitucional de México ha iniciado un nuevo ciclo”, añadió.
Bolaños Aguilar sostuvo que la Constitución ha sido además un acuerdo sólido y al mismo tiempo flexible. “Ha sido capaz de transformarse y adaptarse a nuevas realidades y a nuevas aspiraciones”.
El diputado panista expuso que “es un ente dinámico y adaptable, no puede concebirse en forma alguna como una realidad rígida e inamovible, incapaz de representar las realidades y aspiraciones de una nación en movimiento, con una sociedad abierta y cada vez más participativa”.
Como muestra de ello mencionó las 699 modificaciones a sus artículos, que han hecho de la ley fundamental una norma acorde a los tiempos y las realidades cambiantes de la nación mexicana.
Precisó que “la Constitución del 17, a pesar de estos cambios, existe como realidad política y como realidad jurídica, siendo el fundamento del acuerdo nacional y base de nuestros consensos”.
Las reglas, las formas y las instituciones que le dieron forma a la política, la economía y la sociedad del México de la posrevolución y de finales del siglo XX han cambiado de manera definitiva, comentó.
Precisó que lo han hecho por la demanda de la sociedad y de las fuerzas políticas nacionales “y han sido éstas las que han impulsado la modificación de nuestro texto normativo fundamental, para actualizarlo y perfeccionarlo a las nuevas realidades sociales y económicas del país”.
“Hay nuevas reglas, hay nuevas instituciones y una cada vez más fortalecida autonomía. Nuevas reglas de control y de equilibrio de Poderes y, por tanto, vemos el desarrollo de nuevas formas de ver y de entender a la política y a la sociedad”, aseveró.
Por eso, agregó, “la Constitución es continuidad histórica y realidad presente. Las reformas constitucionales impulsadas en los últimos años han rediseñado el escenario político y jurídico nacional, de una manera íntegra, proyectando a nuestro país de lleno hacia el siglo XXI”.
Resaltó que la Constitución de 1917 es pasado, presente y aún hoy continúa siendo camino para el futuro de México y de los mexicanos.
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