Palacio Legislativo, 16-02-2017 (Notilegis).- El coordinador de los diputados del PRI, César Camacho, afirmó que la Ley de Seguridad Interior es una urgencia para las fuerzas armadas, pero es fundamental desahogar todas las audiencias necesarias para no cometer equivocaciones en su dictaminación.

“Es una disposición que requieren las fuerzas armadas con urgencia, no obstante la urgencia no puede conducirnos a las equivocaciones … es decir, no hay una prisa que pueda provocar o generar riesgos”, sostuvo en declaraciones a la prensa.

Advirtió de la necesidad de desahogar “todas las audiencias o encuentros que haya lugar, sin que ésto entre a la parsimonia legislativa”.

Resaltó la importancia que en este sentido tendrá la presencia del titular de la Secretaria de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, el próximo primero de marzo, en el seno de la Junta de Coordinación Política (Jucopo).

En esa reunión se ampliará la discusión “sobre seguridad interior y también respecto al mando único o mando mixto (de la policía en los estados), no obstante que no son temas indisolublemente ligados, pero están relacionados”, aseveró el líder parlamentario.

César Camacho comentó el encuentro que sostuvieron ayer miércoles los coordinadores parlamentarios que integran la Jucopo con los presidentes de las comisiones de Gobernación, Mercedes del Carmen Guillén Vicente (PRI), y de Seguridad Pública, Jorge Ramos Hernández (PAN).

Precisó que se comentaron los avances en el dictamen en materia de seguridad interior.

“Seguramente con estos análisis y el desahogo de estos encuentros, la Comisión (de Gobernación) estará en condición de dictaminar”, destacó.

Consideró que al encontrarse “a la mitad del primero de tres meses del periodo ordinario (de sesiones, que concluye el 30 de abril), los priistas –y creo que los partidos con los que hemos construido planteamientos en común– tenemos esperanza fundada de que este mismo periodo tengamos dictamen”.

“Hay total apercibimiento de la necesidad urgente de contar con una ley (de seguridad interior) que vendría a colmar una laguna jurídica”, pero “nunca al punto de que la urgencia nos haga trastabillar o peor aún equivocarnos”, insistió.

Subrayó la necesidad de escuchar a todos los actores involucrados y “de descarriar cualquier sospecha o preocupación de que una disposición de esta naturaleza pueda lesionar o arriesgar la observancia cabal de los derechos humanos”.

El dictamen que se elaborará en la Cámara de Diputados “tendrá que encontrar las convergencias entre todas las iniciativas, del Senado y de la Cámara de Diputados”, finalizó.

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