Palacio Legislativo, 23-02-2017 (Notilegis).- El vicecoordinador del PRI, Jorge Carlos Ramírez Marín, afirmó que una reunión entre el presidente Enrique Peña Nieto con los secretarios de Estado y de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Rex Tillerson y John Kelly, “sí conviene para las relaciones exteriores y el impulso de las negociaciones” bilaterales.

“Creo que todo lo que ayude a las relaciones entre México y Estados Unidos, y que nos favorezca, debe hacerse”, dijo en declaraciones a la prensa.

El diputado priista fue consultado sobre la conveniencia de que el mandatario Peña Nieto se reúna con los funcionarios estadounidenses, en el marco de la visita que estos realizan al país para analizar con funcionarios mexicanos temas como migración, seguridad y comercio.

“Si las negociaciones han sido productivas, marchan por un buen camino o la intervención del Presidente (de México) las puede desatorar o impulsar, debe de ir, debe de realizarse esa reunión”, insistió Ramírez Marín.

“La diplomacia no es para caprichos, la diplomacia es para poner puntos sobre la mesa y conseguir esos puntos”, puntualizó.

Reiteró que “todo lo que ayude e impulse las relaciones de México con Estados Unidos, debe de hacerse, así de sencillo. La cuestión de los pares es entre diputados, entre Estados lo que hay respeto y (reunirse) no constituye ninguna falta de respeto”, añadió.

Respecto al Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), Ramírez Marín señaló que “México ha empezado la discusión, se está preparando con las cosas que le interesan, pero no ha iniciado todavía ninguna negociación sobre el TLCAN”.

Refirió que aun cuando el presidente Donald Trump ha hecho el señalamiento, “en ningún caso ha aprovechado las facultades que tiene para manifestar la salida de los Estados Unidos del TLCAN”.

Dijo que coincidía con lo expresado por Videgaray Caso, porque "una cosa es que Estados Unidos pida cambiar condiciones del TLCAN, pero si no nos convienen, los que nos salimos somos nosotros”.

“No le conviene a Estados Unidos gravar las importaciones mexicanas, porque la pagan los norteamericanos; nosotros además podríamos hacer lo mismo, aplicarle un gravamen a las importaciones norteamericanas –algunas muy importantes como las agrícolas– y sería muy malo para los productores norteamericanos”, sostuvo.

En cuanto a la política anti inmigrante del presidente Donald Trump, Ramírez Marín comentó que aun cuando la actitud de los Estados Unidos llega a ser, por momentos, hostil, también es cierto que “hay un intenso diálogo”, como lo demuestran las visitas recíprocas de los secretarios de Estado de ambos países.

“Sí hay muchas cosas concretas: hay diálogo, hay una comunicación permanente y, a pesar de las amenazas (de Donald Trump), las cifras de deportaciones no alcanzan ni siquiera las que tenía en el mismo mes la administración de (el expresidente, Barak) Obama”.

Aseguró que los consulados mexicanos están listos ante un eventual incremento de deportaciones de migrantes. “Ya están previstas las situaciones que pueden darse y en la mayor parte de ellos están preparados para, en caso de que esta agresiva estrategia se llevara a los hechos, pues hubiera una respuesta mexicana oportuna”, agregó.

“Tenemos que procurar que se cumplan (a los connacionales) estas cosas que han dicho: trato humanitario, igualdad de oportunidades y respeto a sus derechos”

Subrayó que “una cosa es que sean ilegales y otra que sean tratados como criminales; están cometiendo una falta administrativa, pero en ningún caso puede criminalizarse la migración, como está pretendiendo el gobierno de Estados Unidos”.

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