• También la conformación paritaria entre hombres y mujeres

Palacio Legislativo, 01-10-2020 (Notilegis).- La diputada Guadalupe Almaguer Pardo (PRD) aseguró que la masacre del 2 de octubre de 1968, orquestada por el gobierno de aquel entonces, aunada a las luchas de los médicos y de los maestros que se dieron previamente, abrió las puertas para el inicio de la democratización en nuestro país.

Desde la tribuna de la Cámara de Diputados, en el marco de la efeméride del 52 aniversario del Movimiento Estudiantil del 68, la legisladora recordó que el PRD ha enarbolado las banderas democráticas. “Hemos encabezado, en las calles y en los espacios legislativos, la búsqueda por una vida mejor para todas y todos los mexicanos, por la defensa y protección de sus derechos humanos, así como por el reconocimiento de que estas luchas y esos muertos que hoy nos acompañan”.

En un comunicado, dijo que ante la gestión e insistencia del PRD se inscribió como una de las fechas luctuosas en el marco jurídico como el aniversario de los caídos en la lucha por la democracia de la Plaza de las Tres Culturas en Tlatelolco en 1968, “porque nuestro compromiso social va más allá del mero discurso”.

La legisladora destacó que con la lucha de los jóvenes desde 1968 hoy se tiene una conformación paritaria entre hombres y mujeres, se ha avanzado en las reformas en favor de la igualdad sustantiva, y de las libertades de las mujeres, “Derechos que hoy son frenados, lastimosamente, por una mayoría que se dice de izquierda”.

Reconoció que a través de sacrificios de las y los mexicanos se ha construido la democracia en México, “de los cuales los perredistas han constituido un pilar fundamental para que las huestes impulsoras de la barbarie y el oscurantismo nunca más instalen su reino de terror en nuestro país. Tengan por seguro que, desde el PRD, las enfrentaremos con la decisión y valentía que nos da la legitimidad de nuestras luchas”.

Almaguer Pardo detalló que por ello, el PRD, a través de sus diputadas y diputados, expresa su reconocimiento a todas las mexicanas y todos los mexicanos que participaron en el movimiento democrático de 1968, especialmente a aquellos que perdieron la vida el 2 de octubre, “quienes nos precedieron en la lucha por una Patria más justa y más libre”.