Boletín N°. 0302 Reorientar y ajustar presupuesto al campo de manera equilibrada, ofrecen diputados

22- 10- 2015.- El presidente de la Comisión de Agricultura y Sistemas de Riego, diputado Germán Escobar Manjarrez (PRI), afirmó que ante la preocupación por la reducción presupuestaria al campo, su reorientación debe ajustarse a la realidad de los productores.

 

Expresó el compromiso de los legisladores para revertir la disminución de recurso y hacerla equilibrada para todas las regiones, así como impulsar los programas de agricultura temporal, de subsistencia y comercial, y fortalecer los proyectos estratégicos en todos los estados.

 

En reunión con la Asociación Mexicana de Secretarios de Desarrollo Agropecuario (AMSDA), resaltó la necesidad de consolidar los programas concurrentes para establecer equilibrio entre la agricultura de temporal y de riego, ya que se tienen que producir los alimentos con nueva tecnología y apoyos.

 

Se tiene que hacer esto sin dejar de atender la comercialización, porque las importaciones que se realizan son nichos de oportunidad para productores nacionales, e impulsan la generación de alimentos basados en la organización.

 

Refirió que la comisión sostuvo una reunión de trabajo con el secretario de Hacienda y Crédito Público, Luis Videgaray Caso, y el gobernador de Sinaloa, coordinador de la Conago del Campo, para analizar los adeudos que se tienen en la agricultura comercial no sólo con esa entidad, sino con Tamaulipas, Baja California y Sonora. El compromiso es que se pague.

 

Comentó que el secretario Videgaray externó disposición para generar coordinación con la Sagarpa para que se canalicen los recursos y se dé respuesta.

 

Las propuestas de las organizaciones del campo se conjuntarán para construir una integral, que será entregada a la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública, anunció.

 

El diputado Francisco Javier Santillán Oceguera (PRI), apuntó que la violencia generada en el campo nacional es producto de la falta de oportunidades, porque la agricultura dejó de ser un negocio rentable, pese a aumentarse el presupuesto hasta en 179 por ciento desde 2003 hasta el presente año. El impacto ha sido desastroso, además de que la inseguridad inhibe la inversión en muchas regiones.

 

Destacó que por primera vez el PEF 2016 señala la urgencia de atender a los pequeños campesinos, ya que es vital la producción de alimentos. Ante la escases de recursos “no podemos seguir pensando en tener un campo desorganizado, y que los productores sean solo receptores de las decisiones de los funcionarios”. Urgió a manejar de forma diferente la comercialización de la producción de pequeños agricultores.

 

Por el PRD, la diputada Natalia Karina Barón Ortiz afirmó que el campo está desmantelado después del TLC, “nos dejaron sin herramientas y emplazo: vendes o pierdes la cosecha”; se cae en la trampa de que los recursos se lo llevan las grandes comercializadoras de granos que imponen los precios y los campesinos aceptan esos costos porque los agarran jodidos y no tienen opciones. Es una trampa el que los diputados no tengan facultad de opinar sobre el diseño de las reglas de operación.

 

Resaltó la necesidad de fortalecer el Proyecto Estratégico para la Seguridad Alimentaria (PESA) y el Programa Especial Concurrente (PEC), que sufren recortes pese a tener buenos resultados, y frenar la discrecionalidad en la designación del gasto en los estados, porque el funcionario en turno decide a quién otorgarlo y beneficia a su club de amigos, dejando en la indefensión a los verdaderos productores. También participaron los perredistas Guadalupe Hernández Alcalá y Felipe Ángeles.

 

El diputado priista Francisco Escobedo Villegas manifestó preocupación por las condiciones en que se encuentra el campo, cuya prioridad debe ser la organización, ajena a cualquier interés político o ideológico, así como la planeación que contemple la diversificación productiva en las diferentes regiones.

 

Refirió la urgencia de revisar y reorientar el presupuesto destinado al agro para garantizar otros resultados. Se pronunció porque la Cámara de Diputados revise las reglas de operación, porque mucha gente no accede por lo complicado que resulta cumplir los requisitos, y eso fomenta el desorden.

 

A nombre de Movimiento Ciudadano, el diputado Adán Pérez Utrera aseveró que el proyecto presupuestal 2016 para el campo no se basa en la realidad, prevalecen criterios centralistas y burocráticos, cuando el agro requiere un manejo diferente y debe garantizar que los recursos lleguen a los verdaderos productores.

 

El Presupuesto se vincula con el futuro del país y no es el mejor instrumento para resolver la pobreza y apuntalar la soberanía del país, porque la disminución de recursos es muy grave. Precisó que debe cambiar la integración del gasto, los programas y reglas de operación, porque el actual esquema impide lograr los objetivos de muchos proyectos y no llegan a la gente que deben apoyar.

 

El diputado Leonardo Rafael Guirao Aguilar (PVEM), aseguró que a los productores del campo les ha tocado “bailar con la más fea con el Presupuesto Base Cero”, porque no se tienen las herramientas necesarias con un gasto recortado, “no solo es escuchar las demandas de los campesinos, sino dar respuestas y no darles paliativos”.

 

Refirió la crisis de los cafetaleros en Chiapas, donde se sufre la perdida estrepitosa de casi el 80 por ciento de la producción y en esas condiciones no se puede aspirar a comercializar con cosechas tan bajas, porque la planeación es el factor de desarrollo que garantizará el éxito.

 

Por el PRI, el diputado José Hugo Cabrera Ruiz expresó preocupación por el recorte al campo, por lo que urgió a reorganizar la aplicación de recursos con una perspectiva regional y evitar la centralización.

 

“Tendremos que hace un verdadero esfuerzo más allá de posiciones ideológicas o personales”.

 

Del mismo grupo parlamentario, el diputado Óscar García Barrón sostuvo que lo más preocupante en el ejercicio del gasto del campo son las reglas de operación, porque únicamente llegan al Congreso para palomearlas y se publiquen, sin poderlas revisar y eso no debe pasar. Propuso que la comisión analice estos requisitos en cada programa.

 

Pidió a funcionarios de la Sagarpa corresponsabilidad para que sean eficientes en la programación y ejecución del gasto de forma oportuna “ahí hay que apretar tuercas”.

 

A nombre de AMSDA, Francisco Gamboa resaltó que las soluciones regionales benefician más a los campesinos, por lo que propuso construir un nuevo modelo de desarrollo para el agro garantice la gobernabilidad, sin la cual, dijo, difícilmente se tiene la estabilidad social, económica y productiva.

 

Los representantes de ese organismo coincidieron en que el campo atraviesa una crisis profunda y el proyecto de Presupuesto 2016 más que un progreso se observa un retroceso en las propuestas de inversión, porque no se visualizan necesidades regionales, ni se atiende a los pequeños campesinos que son la mayoría de los productores del país.

 

Entre las propuestas destacan la creación de un nuevo acuerdo para el campo, relanzar la política agroalimentaria con un enfoque regional que aliente la producción agrícola y pecuaria, apostándole a fortalecer la descentralización en el uso de recursos.

 

Además, fortalecer el PESA y el PEC; evitar el manejo centralista y discrecional; no exigir el paripassu a los campesinos y priorizar la aportación de su trabajo, porque se quedan fuera de los beneficios por no tener esa aportación.

 

Garantizar la entrega igualitaria de los recursos en el sur y norte del país; atender prioritariamente al minifundio, que representa el 80 por ciento de los productores, para abatir la pobreza, a través de alentar la economía de autoconsumo, y por su tamaño es difícil que participen en un sistema comercial.

 

Diseñar un nuevo modelo de comercialización, ya que el subsidio se queda en los intermediarios sin que llegue a los productores, porque no tiene posibilidades de competir.

 

Que el modelo agroalimentario atienda la producción de autoconsumo, se articulen las reglas de operación, e incluso se establezca un solo requisito para los programas del sector.

 

Impulsar proyectos para ofrecer oportunidades a los jóvenes rurales y evitar el envejecimiento de la población.

 

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