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| Boletín N°. 1297 | Convoca Zambrano Grijalva a fortalecer la Ley antitabaco y hacer obligatoria en todo el país la medida de “espacios libres de humo” |
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11-04-2016.- El presidente de la Cámara de Diputados, Jesús Zambrano Grijalva, llamó a trabajar desde el Legislativo en el fortalecimiento de la Ley General para el Control del Tabaco y hacer obligatoria, a nivel nacional, la medida de “espacios libres de humo” que ya se aplica en la Ciudad de México y otras 10 entidades de la República.
Manifestó, en este sentido, que es necesario cerrar filas con el Gobierno de la República e instancias sanitarias del país e internacionales, ante el escenario de un incremento serio de padecimientos y muertes vinculados al tabaquismo, pues, dijo, 11 millones de mexicanos fuman, y la adicción al cigarro es responsable del 30 por ciento de los casos de cáncer, de acuerdo con estimaciones del Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias (INER) y de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
De igual forma, el legislador enfatizó la importancia de sensibilizar a la población en torno a los daños a la salud y sobre la contribución del comercio ilícito que permite la accesibilidad al tabaco -en particular- de los más jóvenes que, por cuestiones económicas, recurren al consumo de esos productos.
“Se ha señalado por diversos especialistas, la necesidad de que los fumadores sepan que la adicción al tabaco les resta entre 12 y 15 años de vida, y que es un problema de salud pública grave sobre todo entre adolescentes y adultos jóvenes y mayores”, recalcó.
Jesús Zambrano precisó que aun cuando en el año 2015 se invirtieron más de 60 millones de pesos para tratar las consecuencias del consumo de tabaco, “seguimos teniendo un alto índice de mortandad al respecto”.
Al inaugurar la mesa de trabajo “Políticas Públicas para el Control del Tabaco”, organizado por la diputada Marisela Contreras, consideró que aunque el país atraviese una situación complicada en el manejo de sus finanzas, “no se puede dejar de atender prioridades en la salud pública, como lo es el tabaquismo”.
Instó por lo tanto a “asumir con responsabilidad” este asunto, ya que el consumo del tabaco afecta principalmente a los jóvenes y porque, según prevé la Organización Mundial de la Salud (OMS), la cifra de decesos por tal adicción a nivel global aumentará a ocho millones anuales para 2030.
Ante este escenario, el diputado federal refrendó su convicción de incorporar nuevos elementos a la Ley General para el Control del Tabaco (publicada en 2008) para enriquecer la visión de lo que actualmente implica fumar y sus consecuencias.
Al tomar la palabra, el presidente de la Junta de Coordinación Política (Jucopo), César Camacho, afirmó que el Poder Legislativo “llegó tarde” a participar en el combate al tabaquismo, ya que la primera norma en la materia tiene menos de 10 años, además de que ha caído en la obsolescencia.
“Estamos llegando tarde y la legislación se ha quedado corta en muy corto plazo”, enfatizó el también coordinador de la fracción parlamentaria del Revolucionario Institucional.
Sostuvo que “a diferencia de otros temas espinosos”, éste no se encuentra sujeto a visiones partidistas ni forma parte de ideario político alguno, sino que está contemplado en el programa de acción de casi todas las bancadas de San Lázaro; de ahí que tanto el PRI como el PRD, Movimiento Ciudadano y el PVEM, hayan presentado iniciativas de reforma en la materia.
César Camacho opinó que las leyes de combate a las adiciones y control del tabaco, deben ser transversales, es decir, tienen que incidir en el cambio cultural del mexicano -su conducta- para prevenir males derivados del consumo del cigarro, en lugar de sólo estipular castigos y tipificar como delito las faltas en el rubro.
Eduardo Lazcano Ponce, director general adjunto del Centro de Investigación en Salud Poblacional, del Instituto Nacional de Salud Pública (INSP), refirió que por concepto de impuestos a los productos de tabaco, se recaudaron cerca de 159 mil millones de pesos entre 2010 y 2014, ingresos que “debieran destinarse para consolidar las políticas de control de tabaquismo”.
De acuerdo con informes oficiales, continuó, en el siglo XX, la exposición al tabaco, a nivel mundial, produjo alrededor de 180 millones de muertes prematuras y la calidad de vida de los fumadores disminuyó.
La Encuesta Global de Tabaquismo en Adultos 2015, reporta que el 16.4 por ciento de este sector poblacional en México fuma tabaco, esto es, cerca de 14.3 millones de mexicanos: 10.6 millones hombres y 3.8 millones, mujeres.
Advirtió de que en los últimos años, se ha reducido la edad promedio de inicio de fumar, mientras que la exposición al humo de tabaco se mantiene elevada en bares y centros nocturnos (72.7 por ciento) e instituciones de educación superior (42.4 por ciento).
Ante tales cifras, Lazcano Ponce propuso al Poder Legislativo impulsar medidas como una ley nacional que promueva espacios libres de humo de tabaco; incrementar pictogramas de advertencia en las cajetillas a más de 50 por ciento de su superficie, y prohibir completamente la promoción y patrocinio de las marcas de cigarros.
Aunado a ello, solicitó reforzar las leyes para prohibir la venta de cigarros por unidad, además de promover una norma para regular el uso de dispositivos de liberación de nicotina, incluyendo los cigarros electrónicos, pues aunque sólo el 5 por ciento de la población lo ha usado alguna vez “puede incrementarse su uso entre los grupos más vulnerables”.
Adriana Blanco Marquizo, de la Oficina de Control de Tabaco de la Organización Panamericana de la Salud, afirmó que el consumo del cigarro de forma constante es “una adicción que quita el poder de libertad a las personas”, aunque aún prevalece la idea de que es una decisión personal.
“Explicó que el consumo de tabaco es el único factor común de riesgo en las enfermedades crónicas (enfermedades respiratorias, cardiovasculares, diabetes y cáncer), que son “la peor epidemia en el mundo” y responsables del 80 por ciento de muertes en distintos países.
En los últimos años México fue el único país que no pudo disminuir el consumo del tabaco, por lo que se debe trabajar para llegar a la meta de reducir 30 por ciento su uso para bajar las tasas mortalidad.
Llamó a garantizar ambientes libres de humo de tabaco en todos los lugares, incluyendo espacios públicos, centros de trabajo y transporte, lograr una prohibición total de toda la publicidad y el patrocinio para y proveniente de esta industria, así como el aumento de impuesto debido a que “es una medida importante, ya que es fuente de ingresos e inhibe el consumo”.
El Comisionado Nacional Contra las Adicciones, Manuel Mondragón y Kalb, alertó que desde 2010 no se ha hecho ninguna actualización a los marcos legales que comprenden el consumo del tabaco, a pesar de que “es algo fundamental”, por lo que la Cámara de Diputados contará con el apoyo de la Secretaría de Salud y la Conadic para tal fin.
Debe trabajarse por el cambio cultural para abatir esta situación, ya que el tabaquismo es una enfermedad prevenible al cien por ciento.
“Quien por curiosidad y, desgraciadamente los medios de comunicación y la cultura nos llevan a actuar de esta manera, prueba el cigarro nunca sabrá si estará dentro del porcentaje adictivo y que morirá a consecuencia de esto”.
Reafirmó que los temas de salud “no tienen colores, ni enfoques de grupos políticos o partidos, debido a que afectan a cualquiera”.
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