• Los obliga a inculcarles respeto a autoridades escolares y a normas de convivencia

11- 10- 2016.- La Cámara de Diputados aprobó por 411 votos a favor reformas a los artículos 14 y 66 de la Ley General de Educación, a fin de establecer que es obligación de quienes ejercen la patria potestad o la tutela inculcar a sus hijos o pupilos el respeto a las autoridades escolares y a las normas de convivencia en la escuela.

El dictamen de la Comisión de Educación Pública y Servicios Educativos señala que corresponderá a la autoridad educativa federal y las locales, informar a la comunidad escolar los beneficios, el sentido y las modalidades de participación que se tienen en los centros de enseñanza.

Al respecto, la diputada Rocío Matesanz Santamaría (PAN), secretaria de la comisión, explicó que la Reforma Educativa requiere sumar esfuerzos y tener claro el papel que jugará cada sector de la sociedad civil; de ahí que las autoridades, maestros y padres de familia deben asumir un papel más proactivo en el proceso de aprendizaje.

Refiere que la Ley General de Educación reconoce que las familias pueden y deben tener presencia en la vida de las escuelas a través de los órganos constituidos para tal efecto, que son los consejos de participación social o las asociaciones de padres de familia.

“La política de participación de los padres de familia o tutores en la formación escolar de sus hijos plantea una misión en común: que la educación, pensada como formación y promoción de valor y actitud vital, solo se puede realizar plenamente si se trabaja en conjunto”, aseguró.

Al dar el posicionamiento por Encuentro Social, la diputada Ana Guadalupe Perea Santos consideró que una mayor inclusión familiar en la educación formal necesariamente aportará a una mejor formación personal e incrementará las posibilidades de éxito académico de los educandos.

Coincidió en que la cooperación de ambas partes, a través de políticas, acciones y recursos que ayuden a estrechar el vínculo entre las familias y la escuela, constituyen un pilar educativo que necesitaba ser rescatado por la legislación nacional.

Por Nueva Alianza, la diputada Carmen Victoria Campa Almaral apuntó que por ley el sistema educativo nacional asegura la participación activa de todos los involucrados en el proceso de enseñanza, con sentido de responsabilidad social, privilegiando la participación de los educandos, padres de familia y docentes.

No obstante, añadió, “la precariedad de la circunstancia económica de las familias y las múltiples carencias sociales con las que se encuentran nuestras comunidades, contrarrestan las posibilidades para la atención de las actividades escolares de nuestros hijos”.

Al fijar la postura de Movimiento Ciudadano, el diputado Jorge Álvarez Maynez subrayó que son los padres de familia quienes ven por la educación de sus hijos y son los que han sostenido el sistema educativo de México. “Hablando de escuelas públicas, dos de cada tres pesos que se invierten en apoyo educativo y material extraordinario son puestos por los padres de familia, no por el gobierno”.

Según datos del Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE), los padres en escuelas públicas terminan poniendo más dinero en materiales extraordinarios y apoyos a la escuela, que quienes tienen a sus hijos en una escuela privada, aseguró. “Nueve de cada 10 escuelas comunitarias se sostienen, en lo que tiene que ver con alimentación para niños y maestros, con aportaciones de los padres de familia”.

De Morena, la diputada Patricia Elena Aceves Pastrana celebró la iniciativa, ya que reconoce la labor de los maestros “en un momento de campañas de desprestigio y satanización hacia la figura de los docentes”, a pesar de ser una parte fundamental de la educación de millones de menores mexicanos.

Consideró que actualmente las figuras de la familia y la escuela se encuentran separadas, y la primera ejerce gran influencia en la formación de los menores. “Si no existe cooperación entre ambas puertas, el niño sufrirá problema para su permanencia y tendrá limitaciones en su educación”.

El diputado del PVEM, Cesáreo Jorge Márquez Alvarado, aseguró que es indispensable generar los mecanismos de participación de la comunidad escolar y los padres de familia. Es a través de la inclusión como se generarán las condiciones para consolidar la Reforma Educativa, señaló.

“Debemos garantizar que la educación sea la herramienta más importante para que las niñas, niños y adolescentes estén mejor preparados para afrontar la complejidad de la realidad y compitan de igual a igual ante cualquier reto a nivel mundial”.

Del PRD, la presidenta de la Comisión de Educación Pública y Servicios Educativos, Hortensia Aragón Castillo, puntualizó que este dictamen señala la necesidad de fortalecer el trabajo entre padres de familia y maestros, algo “que hoy en día nos hace mucha falta”, debido a que en el momento actual “pareciese que los maestros son malos y todos los padres son despreocupados de sus hijos”, cuando en su mayoría los primeros sacan adelante a sus alumnos, a pesar de tener condiciones deficientes.

Aclaró que este esfuerzo para realzar el trabajo entre maestros y padres de familia, no debe considerarse como algo que descarta la responsabilidad del Estado. Adelantó que la comisión a su cargo trabaja en la reorganización del presupuesto educativo para que el recorte, por 37 mil millones de pesos, sea en los rubros menos sensibles y no se aplique como lo propone el Ejecutivo.

La diputada Adriana Elizarraraz Sandoval, de Acción Nacional, expresó que esta modificación apunta indudablemente a consolidar el servicio educativo con calidad y equidad para así mejorar los resultados de aprendizaje de los alumnos. “La política de participación social en el ámbito educativo significa incorporar a los padres de familia en la toma de decisiones de las escuelas”.

Abundó que la propuesta plantea la obligación que tienen los padres de familia para con sus hijos de imprimir el sentimiento de respeto a la autoridad del maestro, con el objetivo de que el niño y el joven contribuyan a la dignificación de la escuela.

Del Revolucionario Institucional, la diputada Hersilia Córdova Morán dijo que los padres de familia “se han acostumbrado a dejar el trabajo educativo en manos de los maestros y los directores”, por lo que, con su participación en la vida escolar, los planteles dejarían de ser “una especie de isla” que ha propiciado que las nuevas generaciones, al egresar de su vida académica, se sientan superiores a sus semejantes, despreciando el trabajo físico y desconociendo sus responsabilidades sociales.

“Creemos indispensable que los padres tengan una participación legal e institucionalmente reconocida y definida al interior de las escuelas. Ayudarlos a tomar conciencia de que, elevar la calidad de la educación de sus hijos, es también su responsabilidad”, concluyó.

-- ooOoo --