México tiene todas las herramientas, entre ellas las reformas estructurales y la frontera con la nación más importante del mundo, para ubicarse entre los mejores cinco países del orbe, aseveró el legislador Mario Sánchez Ruiz.

El presidente de la Comisión de Economía de la Cámara de Diputados indicó que además este país cuenta con grandes riquezas naturales y una fuerza laboral que le permitirán lograr ese objetivo.

Ahora, dijo, corresponde que todas esas herramientas y los activos de México se pongan a disposición de la sociedad, reconociendo que aún con las grandes empresas instaladas en el territorio, ya sea nacionales o extranjeras, sigue siendo un país de Mipymes.

En el primer foro “Por una Propuesta Responsable para Mejorar los Salarios Mínimos”, Sánchez Ruiz se manifestó por un debate serio y responsable, así como por privilegiar una perspectiva integral, para mejorar los ingresos de ese tipo en favor de los trabajadores.

“Debemos contribuir a generar un debate serio y responsable, siempre con una perspectiva integral que permita apuntalar soluciones de fondo como consolidar la economía, sus niveles de productividad e inversión y, en consecuencia, generar más empleos y mejor remunerados”.

Refirió que una de las limitaciones que ha tenido que enfrentar la Comisión Nacional de Salarios Mínimos es la vinculación de esa unidad de cuenta con más de 149 leyes, en las que en 871 ocasiones se hace referencia al salario mínimo para algún efecto.

El legislador por el Partido Acción Nacional (PAN) consideró en ese sentido que solamente una vez desvinculado las autoridades federales podrán tomar cartas en el asunto.

Subrayó que “elevar los niveles de productividad se convierte, por tanto, en un paso indispensable, así como la capacitación, el uso intensivo de la tecnología y todo aquello que permita ser eficientes, pues esa es una de las vías para robustecer el sueldo de los mexicanos”.

Mario Sánchez externó que de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) en los últimos 15 años se han generado 5.9 millones de nuevos empleos formales.

Sin embargo, para empatar el crecimiento de la población que se incorporó a la oferta de trabajo debieron haberse sido unos 15 millones, por lo que se tiene un déficit de casi 10 millones. /gh/m