El PRI debe asumir un papel de “oposición real, efectiva y responsable” y “no aprobar las leyes secundarias de la reforma educativa” porque “van en contra de la propia reforma constitucional aprobada”, alertó la diputada federal priista Cinthya López Castro, secretaria de la Comisión de Educación de la Cámara de Diputados.

Ante las versiones entre diversos legisladores de Morena, PAN y PRD, de que el PRI avalará las leyes reglamentarias de la reforma educativa, la diputada López Castro reprochó que “el PRI no debe ser cómplice ni comparsa de Morena”.

En entrevista con El Financiero, la legisladora insistió en que “yo creo que como PRI debemos de ser una oposición real, y si se dice que el partido será una oposición responsable, pues tenemos que ser efectivamente responsables y votar leyes que no les hagan daño a las niñas y a los niños de México”

Frente a los señalamientos en San Lázaro y de analistas políticos, de que el PRI se encamina a ser un “partido satélite” de Morena y del presidente López Obrador, López Castro insistió: “Sólo espero que tengamos un PRI de verdadera oposición; yo veo inadmisible que el PRI esté apoyando estas leyes. Yo creo que el PRI no debe de acompañar estas propuestas de reformas que, en diversos puntos, contradicen la reforma constitucional que se votó.

“La bancada del PRI avaló la reforma constitucional y yo fui la única que votó en contra; hoy no podemos ni debemos aprobar un supuesto nuevo Organismo de Mejora Continua para la evaluación de los maestros, que está a manos de la SEP, porque me parece una total irresponsabilidad.

“Yo creo que debemos revisar cuál será la postura del PRI. Yo, particularmente, espero que se vote en contra. El PRI puede construir, puede trabajar y asistir a reuniones en la SEP, en Gobernación; yo reconozco del secretario de Educación, del equipo de Enlace Legislativo, el trabajo de los coordinadores parlamentarios, porque hemos estado en mesas de trabajo y se ve el esfuerzo de todos por querer llegar a un acuerdo.

“Sin embargo, no comparto cuestiones como el querer darles preferencia a las Escuelas Normales y no a las licenciaturas como se tenía antes; tampoco la propuesta de desaparecer el Instituto Nacional de la Infraestructura Física Educativa (Inifed) y que se les dé el dinero a los padre de familia, ni mucho menos la creación del Organismo de Mejora Continua, que será juez y parte en la evaluación y selección de los maestros”.