Palacio Legislativo, 09-10-2014 (Notilegis).- Para que México tenga una administración fuerte, correcta impartición de justicia y leyes que permitan la igualdad, se debe reforzar la perspectiva de derechos humanos en todas las acciones de gobierno, afirmó la ministra Olga MarÃa del Carmen Sánchez Cordero. El Estado debe velar porque en las situaciones donde se tengan señales de discriminación o vulnerabilidad se busque la impartición de justicia de manera igualitaria y efectiva, indicó la integrante de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) al recibir la Medalla al Mérito CÃvico “Eduardo Neri y Legisladores de 1913â€. “El Estado tiene el deber de velar porque en toda controversia donde se advierta una situación de violencia, de discriminación o vulnerabilidad por razones de género, etnia, religión, edad, pobreza o escolaridad, sean tomadas en cuenta, a fin de visibilizar la situación y garantizar el acceso a la justicia de forma efectiva e igualitariaâ€, dijo. Manifestó que “alguien que priva de la vida a otro destruye su humanidad y lastima la de los demás; quien impide a alguien alzar su voz, silencia la voz de todos; quien no ve a la mujer como igual, nos discrimina a todas; quien no respeta a los ancianos, no respeta su propio devenirâ€. Asimismo, “quien excluye a los indÃgenas, olvida su pasado; quien vulnera la integridad fÃsica de un niño o niña o de un adolescente de manera violenta, aniquila sus emociones y acaba con el futuro del paÃs; quien no es sensible a la condición de las personas en situación de pobreza o discapacidad, elimina la condición humanaâ€. La medalla Eduardo Neri representa el máximo reconocimiento que la Cámara de Diputados entrega a los ciudadanos que se distinguen por servir a la colectividad nacional y al paÃs por sus hechos cÃvicos o polÃticos. En su discurso ante el Pleno, en sesión solemne, Sánchez Cordero resaltó que las instituciones del Estado tienen la obligación principal de legislar, juzgar o implementar polÃticas públicas para devolver la condición humana a quienes se les ha arrebatado. Subrayó que es deber del Estado, y su razón de ser, mantener el respeto irrestricto a la dignidad humana y devolverla a quien le ha sido negada. Agregó que devolver la condición humana a alguien, tiene que ver con darle actualidad a sus derechos, lo que se logra cuando los poderes constituidos garantizan la plena vigencia del orden establecido en la Constitución. También se pronunció por defender la dignidad humana y los derechos humanos visibilizando a quienes han sido invisibilizados o silenciados y a quienes se les han vulnerado los derechos más elementales. “Aun en estos tiempos, ser mujer, adulto mayor, niño, niña, persona con discapacidad, indÃgena, migrante o encontrarse en situación de pobreza en nuestro paÃs es ser altamente vulnerableâ€, expresó. La ministra consideró que, en especial, se debe dignificar la situación de las mujeres en el paÃs, buscando que se respeten sus derechos, se les trate de manera igualitaria y sin discriminación. “Si alguna huella quisiera que quedase a mi paso por las instituciones de este paÃs como aportación, será haber logrado generar la perspectiva de género en las labores en que me he desempeñadoâ€. Finalmente, opinó que la niñez es el “cimiento del porvenir†y el “corazón del paÃsâ€, por lo cual se debe velar por su interés superior. Por ello, solicitó al presidente de la Cámara de Diputados, Silvano Aureoles Conejo, que realice las gestiones necesarias para que el premio en económico que se le otorgó junto con la presea sea entregado Ãntegramente al programa que protege a la niñez migrante del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef). Además de la medalla, se le entregó un pergamino alusivo al dictamen de la Comisión de Régimen, Reglamentos y Prácticas Parlamentarias, y una suma de dinero equivalente a tres veces la dieta mensual de un ciudadano diputado. OAA/JGM |