Palacio Legislativo, 04-10-2016 (Notilegis).- El diputado Armando Luna Canales (PRI), presidente de la Comisión de Derechos Humanos, sostuvo que a pesar de que el Estado ha implementado políticas orientadas a la erradicación de la Trata de Personas, este delito es la segunda fuente de ingresos del crimen organizado.

Durante el foro Internacional “La Explotación Sexual: Violación de Derechos Humanos”, agregó que es necesario dar un paso decidido hacia la liberación de miles de personas que hoy viven en condiciones de esclavitud y generar acciones de prevención, erradicación y castigo de la trata de personas.

Subrayó que la trata de personas es la esclavitud moderna, en la cual una persona decide, desde la presión de otra, eliminar su libre albedrío, delito que afecta a niños, mujeres y hombres quienes son víctimas de esclavitud sexual, trabajo forzado y tráfico de órganos.

Muchas veces la sociedad ignora a la trata porque lo ven parte del paisaje. “Hemos aprendido a ser tolerantes con las personas que son obligadas a prostituirse en contra de su voluntad”, resaltó el legislador.

La presidenta de la Comisión de Igualdad de Género, Laura Nereida Plascencia Pacheco (PRI), informó que en el tema presupuestal sólo se le destina el uno por ciento a la protección de los niños, a pesar de datos de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos y Unicef en México, los cuales señalan que diariamente cien niños pueden ser víctimas de trata de personas.

La legisladora hizo un llamado para que las acciones de atención se focalicen en la demanda, ya que si no existiera una solicitud, no se tendrían personas víctimas de explotación sexual.

“Hoy más que nunca es importante la concientización, sí a las leyes severas y castigo a las personas que inciden en este tipo de delitos, pero sobre todo a quienes son “explotadores sexuales”.

También se debe avanzar en el protocolo de prevención contra la trata de mujeres y niños, pues las ciudades donde existe mayor actividad de este delito son: Acapulco, Cancún, Tijuana, Guadalajara y Tapachula; por lo tanto, es necesario que los tres órdenes de gobierno implementen acciones para prevenir y sancionar la trata de personas.

La diputada Julieta Fernández Márquez (PRI), presidenta de la Comisión Especial de Trata de Personas, señaló que el problema del delito de trata es que no hay un bien que confiscar, lo cual hace confuso y difícil de combatir.

Al inaugurar el Foro, desatacó que el tema es cultura, pues es un asunto de poder de una persona sobre otra, se toma en cuenta la vulnerabilidad y desprotección de la víctima para que no haya otra salida y otorgue su dignidad a través del engaño.

“Tenemos que ser sinceros y honestos, nos falta muchísimo por hacer y requerimos conocer experiencias de otros países y con ello avanzar en la materia”.

Se debe trabajar para desalentar la demanda, y buscar la vacuna ante la indiferencia, por la cual no se combate este delito.

El coordinador del grupo parlamentario del PRI, diputado César Camacho, señaló que independientemente de la visión partidaria, todos los legisladores están comprometidos en combatir los asuntos relacionados contra el libre desarrollo de la personalidad y dignidad humana.

Los tres niveles de gobierno deben unir esfuerzos y buscar la eficacia en el marco jurídico en la materia, ya que es el único factor que mide la ciudadanía, no la retórica, sino los resultados.

La explotación sexual es incompatible con los valores de la democracia, debido a que atenta al respeto irrestricto de los derechos humanos.

Refirió que el Legislativo tiene el compromiso de perfeccionar el Sistema de Protección de los Derechos Humanos para prevenir, disminuir y erradicar la violencia de género en México.

El representante regional de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC), Antonio Luigi Mazzitelli, dijo que la vida humana no está a la venta; por lo tanto, la trata no es aceptable, pues va en contra de cualquier principio ético, moral y religioso que tiene que guiar al ser humano hoy en día.

Para terminar con la explotación sexual se debe reducir la oferta y al mismo tiempo impactar en la demanda, además de prevenir que haya nuevas víctimas.

Monseñor Marcelo Sánchez Sorondo, canciller de la Academia Pontificia de la Ciencias Sociales, consideró que no sólo se debe perseguir a los traficantes, a los proxenetas y sus colaboradores, sino a los que propician el mercado.

Propuso crear un movimiento para que el problema del no respeto de la dignidad humana, sea reconocido como un crimen de lesa humanidad, para que a todos los traficantes, se les pueda castigar porque estos no tienen prescripción y se penalice a quienes consumen estos servicios.

Rosi Orozco, presidenta de la Comisión Unidos contra la Trata, destacó que el 47 por ciento de la nación es propensa a ser víctima de la trata de personas, por lo que consideró necesario proteger a los más vulnerables.

Aconsejó que “las empresas despidan a los perversos que compran a seres humanos y a quienes usan su poder para fomentar estos delitos”. Asimismo, pidió dar una oportunidad a quien hoy no puede tener sueños, y es explotada en las calles de Sullivan, y en los giros negros de Tijuana.

Ruth Delgadillo Martínez, representante del Consejo Ciudadano de la Ciudad de México, indicó que se debe trabajar para que las víctimas no sientan desconfianza para decir a las autoridades lo que está pasando.

Explicó que su asociación se encarga a través de la asesoría telefónica de brindar confianza a las personas para que pueda tener información y acercarlas con las autoridades para que denuncie y pueda perseguir el delito y rescatar a más víctimas.

Finalmente, Martha Torres Herrero, representante de la Coalición por la Abolición de la Prostitución Internacional en Latinoamérica, apuntó que para hacer frente a la trata de personas es necesario promover la atención de las víctimas y la reparación del daño, nunca la criminalización de las personas que están en situación de prostitución.

Se deben implementar programas que les permitan salir de las condiciones de explotación y condenar cualquier situación de trata, explotación y todo tipo de comprar de servicio sexual.

RED/JGM