Palacio Legislativo 24-04-2017 (Notilegis).- Ante la nueva política migratoria de Estados Unidos, México enfrenta el desafío de pasar de ser un país de origen y tránsito de migrantes a un lugar de destino, lo que genera muchas presiones sociales, afirmó el embajador de la Unión Europea (UE) en México, Andrew Standley.

“La postura mexicana en los foros internacionales de migración está cambiado”, indicó al participar en la conferencia “Modelo Interno de Naciones Unidas ITAMMUN. 20 Aniversario”.

Expuso que México ya no ve el fenómeno migratorio desde la perspectiva de un país de origen, sino como una nación de destino porque con la nueva política migratoria del presidente Donald Trump, muchos centroamericanos deciden asentarse en el país.

Añadió que México requiere atender las dos principales causas de la migración que son la inseguridad y la falta de oportunidades económicas, así como apostarle a más cooperación con el país vecino del norte, la UE y los países centroamericanos expulsores de migrantes.

El diplomático también dijo que Europa debe aceptar que sí necesita más migrantes y establecer las condiciones para su llegada de manera ordenada, a fin de mantener sus sistemas sociales que se dificultan por el envejecimiento de su población.

Sostuvo que la llegada de miles de refugiados sirios calificados a países europeos es, en términos económicos, algo muy positivo, ya que se reciben, de manera gratuita, personas formadas, capacitadas y educadas.

“El gran desafío para la Unión Europea es aceptar que sí se necesitan más migrantes y luego cómo definir condiciones para una migración ordenada. Además, la llegada de decenas de miles de refugiados sirios y muchos de ellos con un alto nivel educativo es, de cierta manera, un regalo que está recibiendo Europa”, señaló.

Standley explicó que Europa tiene una población cada vez más vieja y, para financiar sus sistemas de seguridad social, requiere de más personas económicamente activas, que aporten a los sistemas sociales, en comparación con el número de jubilados.

“Europa tiene una población cada vez más vieja y para poder financiar sus sistemas de seguridad social, depende de tener más personas trabajando. Tenemos lo que se llama la tasa de dependencia donde se deriva que por cada jubilado, se tiene 1.8 personas trabajando, lo que es muy poco favorable”, detalló.

Agregó que Europa tiene sólo dos vías para compensar su situación demográfica: incrementar la tasa de natalidad y, para ello, dar incentivos para que las parejas tengan más hijos y la migración.

Insistió en que pese a la reacción de rechazo de la sociedad europea hacia los migrantes y refugiados, la realidad es que representan un activo positivo para Europa.

El funcionario europeo también se refirió al tema del Brexit, en donde consideró que pese a que hay voces que refieren un retroceso en la salida de Reino Unido de la UE, ésta “es inevitable, ya que en unos días comenzará el proceso de negociación para su salida y eso no se va a modificar”.

Aclaró que el objetivo de la negociación es establecer las mejores condiciones futuras mutuamente provechosas para la UE y la Gran Bretaña, pero de ninguna manera la relación puede ser más favorable para Reino Unido que para cualquier país miembro de la UE.

“Se ha hablado de una negociación muy selectiva, en donde el Reino Unido quiere seguir beneficiándose de algunos programas de la UE de manera muy selectiva y no en todos, pero es inevitable que un país fuera de la UE como lo va a ser Reino Unido, no va a tener el mismo acceso privilegiado y favorable que los 27 miembros de la UE”, advirtió.

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