Palacio Legislativo, 31-07-2018 (Notilegis).– La ex presidenta de Costa Rica (2010 y 2014), Laura Chinchilla Miranda, afirmó que América Latina es una de las tres regiones del mundo con mayor índice de corrupción, por lo que es necesario incentivar y fortalecer los mecanismos, establecidos por cada país, para frenar este “lastre”. De acuerdo con el Índice de Percepción de Corrupción (IPC) de 2017, que realizó Transparencia Internacional (TI), “sólo tres países de América Latina (Uruguay, Chile y Costa Rica) se salvan de este fenómeno”, sostuvo al participar en el foro "Lucha Anticorrupción. La experiencia internacional”. El resto de las naciones de esta región se mantienen en los puestos bajos, donde 0 es con menor corrupción. México ocupó el puesto 135 de las 185 naciones evaluadas a escala mundial, agregó durante su ponencia “Corrupción, políticas públicas y ciudadanía”. La politóloga costarricense expuso que de 2015 y 2018, se dieron a conocer tres casos importantes de corrupción, que involucraba a toda la región latinoamericana, que fueron el de la empresa Oderbretch, el escándalo deportivo y corporativo de la Federación Internacional de Fútbol Asociación “FIFA Gate” y los “Panamá Papers”, a lo que nombró “la caída de los tres gigantes”. “Con este conjunto de casos vimos que por primera vez escándalos de tal magnitud, que involucraban personas del ámbito político y corporativo, no se pudieron escapar del alcance de la acción judicial. Es decir, América Latina empezó a verle la cara a los corruptos de sus países”, aseveró. Aunado a ésto, al analizar los marcos jurídicos y normativos de los países de Latinoamérica, se observa “un impresionante arsenal, de tratados y convenios internacionales, de buenas prácticas que se han venido adoptando por ellos”, dijo Chinchilla Miranda. Manifestó que en 2015 y 2018 "casi se dio una refundación de las instituciones de nuestras naciones”, y dijo que las reformas normativas de combate a la corrupción deben de evaluarse y revisarse permanente, para fortalecerlas y profundizarlas. De igual manera, se debe evitar que exista un descredito de las instituciones de combate a la corrupción y de la administración de justicia, abundó. También pidió que se ponga énfasis en tres áreas que son focos claros de corrupción: las aduanas, las adquisidores de bienes y la distribución de ayudas sociales. En el caso particular de México, se congratuló con la LXIII Legislatura del Congreso de la Unión, por la aprobación de las leyes General del Sistema Nacional Anticorrupción, General de Responsabilidades Administrativas, Orgánica del Tribunal Federal de Justicia Administrativa y Federal de Transparencia y Acceso a la Información Pública, entre otras. La aprobación de la normativa anticorrupción y la mejora de las sanciones, “pone de relieve la magnitud de los cambios institucionales que alcanzaron a México”. “Estas reformas son de gran calado, le devuelven la esperanza a los ciudadanos de que el tema de la corrupción se va a abordar de una vez por todas, de manera metódica y desde las instituciones mismas”, externó Chinchilla Miranda. No obstante, advirtió, entre las deudas pendientes se encuentran la implementación de las reformas procesales y penales, y la indispensable independencia que deben tener las instituciones encargadas de la persecución penal de un país. RZJ/JGM |