• Certamen busca reflexionar sobre los procesos sociales e históricos del país: diputado Sebastián Alfonso de la Rosa Peláez

• Anuncia que está en curso la recepción de trabajos de una segunda etapa, que concluirá en noviembre próximo

07-08-2014.- Lograr un mejor conocimiento y comprensión de la historia de México debe apoyarse en el análisis constitucionalista, porque la Carta Magna de 1917 condensa todos los procesos sociales e históricos de la nación, afirmó el diputado Sebastián Alfonso de la Rosa Peláez (PRD), presidente del Comité del Centro de Estudios Sociales y de Opinión Pública (CESOP) de la Cámara de Diputados.

Al presidir la ceremonia de premiación del concurso de textos para “La Creación de la Obra Conmemorativa del Centenario de la Promulgación de la Constitución de 1917”, organizado también por el Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE), destacó la importancia de este tipo de estudios.

Por ello, indicó que ya se lanzó una segunda convocatoria, cuya recepción de trabajos concluirá el 16 de noviembre del presente año en el Palacio Legislativo de San Lázaro.

De la Rosa Peláez se comprometió a difundir los cinco ensayos galardonados, a fin de que “no se queden sólo en los archivos e impulsen el conocimiento entre los jóvenes, investigadores y sociedad, para que conozcan nuestra historia a través de la evaluación constitucional”, propuso.

El análisis histórico mediante estos documentos permitirá una mejor comprensión de nuestra realidad sociopolítica, aseveró.

Por su parte, el diputado Julio César Moreno Rivera (PRD), presidente de la Comisión de Puntos Constitucionales, sostuvo que las reformas a la Constitución se enfocan a lograr los mayores beneficios para la comunidad.

Es un trabajo arduo en la Cámara de Diputados, ya que requiere las dos terceras partes de los votos en el Pleno, previo a un gran consenso y discusión en las comisiones. No basta la aprobación del Congreso, sino también el aval de por lo menos 16 de los congresos locales, explicó.

A este proceso se han sujetado reformas estructurales como la educativa, energética, en telecomunicaciones, las candidaturas independientes, así como la pensión para adultos mayores, establecer la edad mínima de 15 años para que los jóvenes trabajen, el arraigo, entre otras, comentó.

El doctor Luis Felipe Barrón Córdova, director de la División de Historia del CIDE y presidente del jurado calificador del Comité para la Conmemoración del Centenario de la Constitución de 1917, sostuvo que esta celebración “no tiene por qué ser sólo un momento para los cuetes y la fiesta. Conmemorar debe ser reflexionar para comprender cómo se hizo y ha aplicado, por qué se ha modificado y en qué circunstancias”.

Los problemas que enfrenta México hoy y la aspiración social de una democracia y justicia social, requieren revalorar la Constitución de 1917. “Lo último que debemos abandonar es la Constitución, porque es la única referencia fija en el horizonte nacional; debe responder a la realidad y ser un proyecto, a fin de cristalizar lo que queremos ser”, resaltó.

Señaló que el objetivo del concurso fue invitar a los académicos del país, sobre todo a los jóvenes, a reflexionar sobre cómo se hizo la Constitución. Las reformas no le han hecho perder su carácter original, porque la historia y las aspiraciones del pueblo no son estáticas y deben reflejarse en la Carta Magna, subrayó.

Al participar, el doctor Rafael Aréstegui Ruiz, director general del CESOP, indicó que sólo a través de conocer la experiencia se puede recuperar la historia. Dijo que los ensayos premiados cumplen el objetivo de reflexionar sobre el significado constitucionalista del 17, pacto social que se reconstruyó en los estados.

Destacó la importancia de difundir los cinco trabajos ganadores, ya que son el resultado del interés genuino de especialistas que puede compartirse con los ciudadanos.

El doctor Sergio López Ayllón, director general del CIDE, aseveró que esta conmemoración es una oportunidad relevante para “darle un vuelco a la pobre cultura constitucional que se tiene, y hacer un esfuerzo conjunto para que los mexicanos entiendan, practiquen y vivan la Constitución como el espacio que genera libertades, oportunidades, además de obligaciones y deberes, y en eso se construya la ciudadanía que requiere el país en el siglo XXI”.

También, para reflexionar sobre el futuro de la Constitución, ya que es también el de México. Sus reformas son 100 años de historia, “tenemos una Constitución que en más de un sentido es nueva, sigue siendo la de 1917, pero hoy se ha transformado sustancialmente, producto de reformas sucesivas porque así ha cambiado el rostro de la nación. Es una oportunidad para analizar y definir qué país queremos y construirlo”, apuntó.

La doctora Patricia Galeana, secretaria técnica del Comité para la Conmemoración del Centenario de la Constitución de 1917, refirió que esta celebración implica “recordar, difundir y reflexionar” sobre la manera en que se formalizó la máxima ley e incorporó los derechos sociales, así como evaluar su aplicación y cumplimiento, además de analizar la evolución del constitucionalismo mexicano.

El doctor Francisco Sales Heredia, director de la División de Historia del CESOP, comentó que el esfuerzo de los representantes populares para discutir, votar y aceptar mayorías se construye, ya que la democracia y el ejercicio del poder, de legislar y normar la vida pública requiere ser descrito y analizado; por eso se ha convocado a un segundo concurso en el marco de la celebración de los 100 años de Constitución.

Los ganadores del concurso fueron Dulce María Sauri Riancho, con el ensayo “El artículo 28 en el Congreso Constituyente: debate por el entonces de Yucatán y el futuro de México”; Aurelia Valero Pie, por “La Constitución de 1917 en la perspectiva de un político tabasqueño: Félix F. Palavicini, periodistas y legislador (1916-1917).

Asimismo, Juan Bernardino Sánchez Aguilar, con el ensayo “Gobierno dividido e inseguridad en los estados. Primeros desafíos para la Constitución de 1917”; Mauro Arturo Rivera León, con “Las otras constituciones: el constitucionalismo local en la reforma constitucional”, y Óscar Rodrigo Carbajal Luna, por “Política de cualidades: ciudadanía y vecindad en el constitucionalismo del Estado de México 1870-1917”.

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