- Deficiente control de la expansión urbana afecta a tierras fértiles
- México puede llegar a ser un Estado fallido si no se atiende esta problemática; seguridad alimentaria en juego
27-05-2014.- Con la finalidad de garantizar reservas estratégicas para la obtención de alimentos que generen seguridad y soberanía, la Comisión de Reforma Agraria aprobó un dictamen para prohibir la urbanización en tierras consideradas de alta productividad agroalimentaria. La reforma al artículo 88 de la Ley Agraria especifica la facultad de la autoridad federal para determinar en qué casos y bajo qué lineamientos serán catalogadas estas tierras como tales y destinarse a una reserva estratégica. Con esta esta enmienda, coinciden los integrantes de la comisión que preside Gisela Raquel Mota Ocampo (PRD), se evitará que los fraccionadores legales y/o clandestinos continúen devastando las tierras de alta productividad con desarrollos de vivienda, lo que “pone en peligro la soberanía alimentaria de los mexicanos”. Anualmente, refiere la iniciativa presentada por la diputada Maricruz Cruz Morales (PRI), México importa grandes cantidades de alimentos, principalmente maíz (70 millones de toneladas), frijol (73 mil toneladas), productos cárnicos (22 mil toneladas) y huevo (211 mil toneladas), entre otros productos. La modificación a la Ley Agraria evitará que en un futuro inmediato nuestro país no disponga de tierras fértiles y aumenten las importaciones de alimentos básicos, destaca el dictamen. Por eso, plantea reflexionar sobre el proceso de expansión urbana en el campo de México, considerando que ha tenido afectaciones significativas. Primero, detalla, el desarrollo rural no ha generado las condiciones necesarias para dinamizar al sector agrícola y con esto radicar a su población, y, segundo, el desarrollo urbano se ha caracterizado por ser deficiente en su control de expansión. La mayoría de la población habita principalmente en seis grandes ciudades, entre ellas el Distrito Federal, Monterrey, Guadalajara, Tijuana, Toluca, y sus zonas conurbadas, las cuales han rebasado sus límites de crecimiento y ahora enfrentan desafíos para su viabilidad, como el acceso al agua, acota el documento. “El constante crecimiento de la población está provocando que México puede llegar a ser un Estado fallido si no se atiende a tiempo esta problemática; por eso, es de cabal importancia atender de manera urgente la seguridad alimentaria, e incrementar la producción”, enfatiza. De acuerdo con la Comisión de Reforma Agraria, pareciera que no existe ninguna alternativa para crear reservas de tierras que permitan producir los alimentos que demanda el pueblo mexicano; sin embargo, no es así. “En las periferias de las grandes ciudades todavía hay miles de hectáreas con características de alta productividad, por lo que se requiere de inmediato su delimitación y prohibición para uso habitacional”, concluye. -- ooOoo – |