• En el primer semestre de 2014 se detuvo a más de siete mil pequeños migrantes que intentaron cruzar solos el país

• Lo hacen en condiciones de muy alta vulnerabilidad; es una crisis humanitaria: Mejía Berdeja

31-01-2015 Es necesario que los albergues de los sistemas DIF nacional, estatales y municipales que reciban a menores migrantes no acompañados, tengan condiciones básicas de atención y cuidado adecuados para evitar un impacto psicológico a quienes son alojados en esos lugares, propuso el diputado Ricardo Mejía Berdeja (MC) en una iniciativa de reformas al artículo 94 de la Ley General de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes.

El legislador destacó que el desplazamiento infantil se produce en condiciones de muy alta vulnerabilidad que impactan con especial intensidad a quienes cruzan el país sin la custodia o cuidado de un adulto.

Advirtió que la situación es considerada por organizaciones internacionales como una crisis humanitaria que representa grandes desafíos para el país, pues en el primer semestre de 2014 el Instituto Nacional de Migración (INM) detuvo a siete mil 600 menores no acompañados, y en 2013 fueron ocho mil 350, de los cuales cinco mil 477 estaban solos.

Mencionó que en México han aumentado las violaciones a los derechos humanos de este sector, que son víctimas de trata de personas con fines de explotación sexual y laboral; tráfico de órganos, extorsión o secuestro para obligarlos a unirse al crimen organizado; además del riesgo de sufrir algún accidente o, en el peor de los escenarios, la muerte.

Destacó la importancia del tema de la seguridad y control en la política migratoria, ya que ésta “puede no solamente contribuir a reforzar los elementos que conforman el ambiente de inseguridad, sino también a incrementar los riesgos para las personas con mayores niveles de vulnerabilidad”.

Reconoció, además, que el reforzamiento de mecanismos de control migratorio ha profundizado la situación de vulnerabilidad y riesgos que enfrentan los niños, niñas y adolescentes migrantes no acompañados, lo que deriva en abuso, violencia, explotación y daños graves a su integridad física y emocional.

Por ello, la necesidad de priorizar las medidas de protección en su paso por México y su estancia en los albergues del DIF, señaló.

Puntualizó que el desplazamiento infantil es un fenómeno sin precedentes, cuyas cifras son preocupantes, pero no reflejan la vulnerabilidad ni los riesgos a los que se enfrentan los niños, niñas y adolescentes que dejan sus países en busca de sus familiares, de mejores condiciones de vida o huyendo de contextos de violencia.

La iniciativa, turnada, a la Comisión de los Derechos de la Niñez, plantea que los sistemas nacional, estatales y municipales DIF, acordarán las condiciones básicas para que los espacios de alojamiento o albergues brinden la atención y cuidado adecuados, sin desatender las necesidades de esparcimiento y juego propias a la edad y condiciones de niñas, niños y adolescentes migrantes, evitando por todos los medios posibles un impacto psicológico.

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