13-02-2015.- El Centro de Estudios de las Finanzas Públicas (CEFP) de la Cámara de Diputados informó que la recaudación de los impuestos ambientales prevista para el 2015, representará el 0.3 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) y el 2.1 por ciento de los ingresos tributarios estimados para el presente año. De esta manera, la nación mexicana dejará de ser el único integrante de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), con menos impuestos ambientales, situación que mantuvo en los últimos años. A través del documento “Impuestos Ambientales en México y el Mundo”, el CEFP detalló que México fue el único país con una relación negativa de -0.8 por ciento en promedio de sus impuestos ambientales como porcentaje de su PIB, situación que contrasta con los de Italia, Finlandia, Dinamarca, Países Bajos y Turquía, los cuales representan entre el 3 y 4.4 por ciento de su PIB. Precisó que esta relación negativa obedece al subsidio que venía otorgando el gobierno federal a los ingresos asociados a los impuestos ambientales, como lo es el Impuesto sobre Producción y Servicios (IEPS) aplicable a las gasolinas y diésel. El impuesto al consumo de estos combustibles, precisó, se convirtió en subsidio cuando los precios internacionales del petróleo eran altos y el gobierno federal tuvo la necesidad de compensar a Petróleos Mexicanos (PEMEX) la diferencia entre los precios internacionales y los internos por la venta de gasolina y diésel, que habían sido fijados por la administración pública a un menor costo. Mencionó que las contribuciones relacionadas con los impuestos al medio ambiente son el IEPS, el Impuesto Sobre Automóviles Nuevos (ISAN) y los impuestos a los combustibles fósiles (vigente a partir de 2014). El Centro de Estudios refirió que, de acuerdo con la Ley de Ingresos de la Federación para el Ejercicio Fiscal 2015, el impuesto a las gasolinas y diésel que conforman parte del IEPS para combustión automotriz dejará de tener subsidio para el presente año. Por ello, abundó, se espera que la recaudación del IEPS para el 2015 sea el equivalente al 0.17 por ciento del PIB; en tanto, se estima que los ingresos por el cobro del ISAN y los Combustibles Fósiles, ascienda a 0.04 y 0.05 por ciento, respectivamente. En suma, expuso, la recaudación de los impuestos ambientales prevista para 2015 representará el 0.3 por ciento del PIB y el 2.1 por ciento de los ingresos tributarios estimados para el presente año. Relató que según la OCDE, en México han aumentado cerca de un tercio las emisiones de CO2 en las últimas dos décadas. Esto se debe principalmente a los sectores energéticos y de transporte. Por su parte, la energía renovable en el suministro total de energía bajó de 12 a 9 por ciento; sin embargo, añadió, “las reformas estructurales recientes podrían ayudar a eliminar los obstáculos para la implementación de energías renovables, certificaciones ecológicas, geotérmica y la producción de energía independiente”. El CEFP abundó que en México se aplica una política tributaria en materia ambiental diferente a la de países como Brasil, Chile, Países Bajos, Finlandia, Dinamarca y Noruega que está orientada a penalizar el mal uso de los recursos naturales y la contaminación al medio ambiente, contribuyendo al cuidado y conservación de los recursos naturales. También está encaminada a reducir la brecha entre ingresos obtenidos de los impuestos relacionados con el medio ambiente y los costos totales por agotamiento y degradación ambiental, precisó el CEFP. -- ooOoo -- |