07-12-2018.- En el marco de los días Internacionales de los Derechos Humanos y de los Derechos del Migrante, a conmemorarse el 10 y 18 de diciembre, el Centro de Estudios Sociales y de Opinión Pública (CESOP) y el Museo Legislativo “Los Sentimientos de la Nación”, proyectaron la película “Artemio”, dentro de las “Tardes de Cine Club”. El director del Museo Legislativo, Elías Robles Andrade, señaló que la migración implica muchos retos, ya que es un fenómeno de movilidad, pero también una oportunidad para generar avance en los países de origen y destino. Comentó que las caravanas de centroamericanos han evidenciado, como nunca antes, la importancia de poner toda la atención a este suceso, para abordarlo debidamente, porque en algún momento “todos somos migrantes”. Expuso que en 1990, por resolución de la Asamblea General de las Naciones Unidas, se llevó a cabo la Convención Internacional sobre la protección de los derechos de todos los trabajadores migratorios y sus familiares. Diez años después se decidió conmemorar, a partir del año 2000, cada 18 de diciembre, el Día Internacional de los Derechos de los Migrantes. “Es por ello que, en este marco, se proyecta esta película que toca, de manera directa e indirecta, esta importante temática, sus retos, perspectivas y oportunidades”, comentó. En el filme Artemio, de la directora Sandra Luz López Barroso, “podemos encontrar una exploración y búsqueda en torno a las raíces de sus personajes, sus relaciones con el territorio y la sociedad en donde nacieron; a su sentido de permanencia y a su labor dentro de las comunidades en las que se desenvuelven”. Artemio es un niño que nació en Estados Unidos, pero vive en un pueblo de Guerrero con su mamá y su nueva familia. Aunque su origen está en México, le resulta difícil sentirse parte de este nuevo lugar. Los personajes nos permiten mirar una realidad en dónde la distancia y aquellas cosas que dejaron atrás, se hacen presentes en cada llamada telefónica. La historia se desarrolla en la Costa Chica de Guerrero donde Artemio y su madre conviven en un espacio y modo de vida llenos de experiencias nuevas para él, desde un funeral hasta la distancia que los separa de su hermana mayor. “Es también ahí donde discuten, a través de la historia, las nociones de familia, nacionalidad, lengua y pertenencia”. La mirada crítica, pero sin juicios, con que la directora y su equipo se acercan a la historia, permite evitar sentimentalismos en torno a la situación que se cuenta. “La migración es un fenómeno que siempre ha existido. El cambio climático, la demografía, la inestabilidad, las desigualdades cada vez mayores y las aspiraciones a una vida mejor, así como a las necesidades no satisfechas en los mercados laborales, nos indican que la migración seguirá existiendo”. A la proyección también acudió la sonidista y colorista del documental, Isis Adriana Puente Enríquez. --ooOoo-- |