24-07-2019.- La Comisión de Salud, que preside la diputada Miroslava Sánchez Galván, aprobó con 24 votos a favor y dos abstenciones, un dictamen que reforma y adiciona diversos artículos de la Ley General de Salud en materia de sobrepeso, obesidad y etiquetado frontal de advertencia de alimentos y bebidas no alcohólicas.

Se establece que las etiquetas o contra etiquetas para alimentos y bebidas no alcohólicas, deberán incluir información nutrimental de fácil comprensión, veraz, directa, sencilla y visible.

El frontal de advertencia deberá hacerse en forma separada e independiente a la declaración de ingredientes e información nutrimental, para indicar los productos que excedan límites máximos de contenido energético, azúcares añadidos, grasas saturadas, sodio y demás nutrimentos críticos e ingredientes que establezcan las disposiciones normativas competentes. La Secretaría de Salud podrá ordenar la inclusión de leyendas o pictogramas cuando lo considere necesario.

Para los efectos de esta ley, se entiende por etiquetado frontal de advertencia de alimentos y bebidas no alcohólicas al sistema de información simplificada en el área frontal de exhibición del envase, el cual debe advertir de manera veraz, clara, rápida y simple sobre el contenido que exceda los niveles máximos de contenido energético, azúcares añadidos, grasas saturadas, grasas, sodio y nutrimentos críticos, ingredientes y demás que determine la secretaría.

Nutrimentos críticos son aquellos componentes de la alimentación que pueden ser un factor de riesgo de las enfermedades crónicas no transmisibles, y serán determinados por la Secretaría de Salud.

El dictamen incluye una modificación para que el derecho a la protección de la salud tenga entre sus finalidades la prevención de las enfermedades, además que en materia de higiene escolar, corresponde a las autoridades sanitarias establecer acciones que promuevan una alimentación nutritiva y la realización de actividad física.

Puntualiza que la promoción de la salud integra la alimentación nutritiva, actividad física y nutrición, enfatiza que los programas de nutrición promoverán la alimentación nutritiva y deberán considerar las necesidades nutricionales de la población. Por lo que propondrán acciones para reducir la malnutrición, promoverán el consumo de alimentos adecuados a las necesidades nutricionales de la población; y evitarán otros elementos que representen un riesgo potencial para la salud.

La Secretaría de Salud tendrá a su cargo establecer las necesidades nutrimentales que deban satisfacer los cuadros básicos de alimentos evitando altos contenidos en azúcares, grasas saturadas, grasas trans y sodio. Tratándose de las harinas industrializadas de trigo y de maíz, se exigirá la fortificación obligatoria de éstas, indicándose los nutrimentos y cantidades que deberán incluirse.

En el ejercicio de la acción de prevención y control de las enfermedades no transmisibles, se difundirá el no exceder los máximos de azúcares, grasas saturadas, grasas trans y sodio, con base en lo recomendado por la propia dependencia.

La Secretaría de Salud considerará los tratados y convenciones internacionales en los que los Estados Unidos Mexicanos sean parte, incluyan materia de etiquetado y se hubieren celebrado con arreglo a las disposiciones de la Constitución.

Al fijar su postura, la diputada de Morena, Graciela Zavaleta Sánchez, aseguró que la salud y la alimentación nutritiva es un derecho humano consagrado en el 4º constitucional, por lo que es necesario el etiquetado definido. “No profundizare sobre la emergencia de obesidad, así como de las enfermedades cardiovasculares y del corazón; sin embargo, insisto en que cada vez más mexicanos mueren por esos asesinos silenciosos�.

Del PT, el diputado Francisco Favela Peñuñuri dijo que lo único que quiere es la claridad de la información y que todos los actores estén contentos. “Debemos escuchar a quienes no han sido escuchados�.

De Morena, la diputada Graciela Sánchez Ortiz comentó que esta reforma es un compromiso de velar por la salud de los mexicanos; es de suma importancia apoyarla en su totalidad.

La diputada Martha Tagle Martínez (MC) dijo que da la oportunidad de responder a un tema que tiene años discutiéndose y que ha logrado avances en otros países de América Latina. “Estamos hoy ante un dictamen que considera todas las iniciativas presentadas, lo que lo hace plural e incluyente, además que atiende a las recomendaciones más importantes en materia de salud�.

Javier Ariel Hidalgo Ponce, diputado de Morena, enfatizó que desde el principio de la legislatura ha buscado una reforma que diera un carácter de Estado contra la obesidad y sobrepeso.

También de Morena, el diputado Víctor Adolfo Mojica Wences se dijo a favor de este cambio, debido a que México sufre una epidemia de diabetes y sobrepeso, pero es algo que la industria que produce alimentos no ha considerado.

El diputado Eleuterio Arrieta Sánchez (Morena) consideró que este dictamen constituye el rompimiento con el ejercicio político que anteponía los intereses particulares frente a los de la sociedad.

Del PES, la diputada Elba Lorena Torres Díaz aseguró que esta modificación a la ley es el inicio para combatir la obesidad en México. “Basta de simulaciones, se debe hacer ese etiquetado, de lo contrario, nunca se va a avanzar�.

El diputado Edelmiro Santiago Santos Díaz (Morena) expresó que la prevención es la mejor herramienta contra cualquier enfermedad y padecimiento; el etiquetado será una parte de las herramientas, lo cual debe ser acompañada por una educación de padres a hijos.

Del mismo grupo parlamentario, el diputado Manuel Huerta Martínez señaló que la industria esconde de manera ventajosa la información nutrimental de los alimentos, por lo que este es el primer paso en contra de la obesidad.

En una segunda ronda, del PAN, el diputado Éctor Jaime Ramírez Barba consideró que hay incongruencias, pues se habla de una industria que da trabajos. Pidió ser cuidadosos y asignar más presupuesto a la lucha contra la obesidad e integrar aspectos de educación física.

Igualmente, la diputada panista Ana Paola López Birlain, dijo que la salud no tiene colores; sin embargo, no hay consenso de que sólo el etiquetado resolverá el problema. “Se requiere un presupuesto adecuado para concientizar a la sociedad en general�.

Del PRD, la diputada Frida Alejandra Esparza Márquez calificó como un avance y primer paso significativo en un tema urgente en donde no se ve realmente los daños y no hay conciencia del impacto de la comida chatarra en la salud. Pidió conocer el ejercicio del presupuesto en materia de salud.

De Encuentro Social, el diputado Manuel de Jesús Baldenebro Arredondo mencionó que México ocupa el primer lugar en obesidad infantil, por lo que es un reto que debe enfrentarse “y este es un primer paso�.

Del PRI, la diputada Frinné Azuara Yarzábal comentó que “este es un buen inicio y se hará historia� para que etiquetados digan si son altos en sodio, grasas trans o azucares.

La diputada María de Lourdes Montes Hernández (Morena) comentó que en muchas ocasiones la gente no lee lo que dicen los envasados, por lo que ahora se requiere enlazar la educación con la salud.

Su correligionario, diputado Alejandro Barroso Chávez recalcó que este cambio es uno de los más importantes en materia de salud; se hace historia y lleva al legislativo a seguir impulsando la salud.

De Movimiento Ciudadano, la diputada Maiella Martha Gabriela Gómez Maldonado dijo que es importante defender este dictamen porque lo que se busca es que la ciudadanía esté informada y haya una corresponsabilidad en el cuidado a la salud, en especial para evitar la obesidad.

El diputado sin partido, Emmanuel Reyes Carmona indicó que quien esté a favor de la salud estará en pro de este dictamen, especialmente aquellos diputados que son profesionales de la salud.

La diputada Carmen Medel Palma (Morena) aseguró que esta reforma es uno de los más grandes logros de esta legislatura, porque la salud a corto y largo plazos es un tema prioritario.

En otro tema, la Comisión aprobó también un dictamen por el que se deroga el segundo párrafo del artículo 240 de la Ley General de Salud, que establecía que los médicos pasantes tenían la facultad para la prescripción de estupefacientes.

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