- Sería un grave error no destinar más recursos a esa inspección que da competitividad en el mercado internacional: Ron Ramos
11- 09- 2019.- Durante el “Foro Sanidad e Inocuidad Pecuaria”, organizado por la Comisión de Ganadería, diputados, productores avícolas, porcinos y bovinos e industriales, se pronunciaron por un presupuesto suficiente para 2020 que mantenga a México en el primer lugar en el ámbito mundial, en el estándar de protección y vigilancia sanitaria de los alimentos consumidos en el mercado cárnico nacional y de exportación. El presidente de la instancia legislativa, diputado Eduardo Ron Ramos (MC), afirmó que sería un grave error del gobierno Federal no destinar más presupuesto a la inspección de la sanidad e inocuidad, factores que dan a México competitividad en el ámbito internacional de cárnicos. Designar más recursos en este rubro no es dilapidarlos. En el marco de la discusión del presupuesto para 2020, apuntó: es vital conocer la problemática y necesidades del sector pecuario nacional en esta materia, para definir decisiones que coadyuven a evitar que ingresen enfermedades y garantizar la calidad de alimentos como el pollo, carne de res y cerdo y sus derivados. La diputada Mirna Maldonado Tapia (Morena), coordinadora de la Subcomisión de Sanidad e Inocuidad Agroalimentaria de la comisión, sostuvo que es imprescindible asegurar la salud animal porque repercute en la de los consumidores, a través de diagnósticos preventivos y oportunos de padecimientos en los hatos ganaderos. Refirió el recorte presupuestal en el presente año al Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica), llamó a trabajar conjuntamente para definir acciones concretas para que el país mantenga un estatus fitosanitario favorable, y se cuide la salud de los consumidores nacionales, y de otros países donde se venden los cárnicos mexicanos y captar utilidades para los productores. También de Morena, el diputado Ricardo Delsol Estrada comentó que las campañas sanitarias llevadas a cabo en algunos estados han sido un fracaso porque las manejan los gobiernos estatales con corrupción, que ha alentado la introducción de ganado enfermo de otras zonas, afectando a los productores regionales, quienes se ven obligados a vender sus reses a precios muy bajos, sin ganancias suficientes. Sobre la reducción del presupuesto, justificó el recorte a la sanidad, “sí lo vemos bien, porque no ha sido implementado de manera responsable”. Propuso crear un organismo que regule y vigile el ingreso de ganado en la frontera sur para evitar el tráfico ilegal de reses contaminadas. De la misma bancada, el legislador Roque Luis Rabelo Velasco denunció a los engordadores de ganado como los responsables del ingreso de hasta un millón y medio de reses enfermas, ilegales y sin un control fitosanitario provenientes de Guatemala y Centroamérica por la frontera sur del país, a cambio de dádivas y a costa de los pequeños ganaderos que carecen de redes comerciales. Estimó las ganancias mensuales en alrededor de 40 millones de pesos, que suman más de 500 millones al año. Actividad que pone en grave riesgo a la ganadería mexicana, cuyos costos en canal han bajado pese a que los de producción han aumentado. Delató la existencia de un mercado negro de aretes, utilizados para identificar a las reses y su vigilancia sanitaria, al hacerlas aparecer originarias de distintas regiones nacionales, cuando son de contrabando. De ingresar a México la fiebre aftosa, el valor de la ganadería bovina caería 80 por ciento, estimó. El diputado Efraín Rocha Vega (Morena), destacó que México ocupa el primer lugar con clasificación A en sanidad e inocuidad, en el ámbito internacional. La categoría más alta que debe mantenerse porque garantiza la competitividad del sector pecuario. Anunció que la miel ingresa a la canasta alimentaria como un producto básico y estratégico, cuya sanidad también debe protegerse. Adelantó que se hace un bosquejo de una ley apícola, cuyos productores se concientizan de la importancia de atender las plagas y enfermedades de las abejas con métodos orgánicos para preservarlas y proteger el ecosistema. Su correligionaria, diputada Ediltrudis Rodríguez Arellano denunció el aumento del abigeo en Tabasco, zona ganadera y lechera; “roban ganado y nadie sabe quién se lo lleva”, con grandes pérdidas económicas para los pequeños productores. Aseguró que el ganado contaminado proveniente de Centroamérica, se oferta de inmediato en ese estado y en Chiapas, “tenemos miedo de que enferme la gente”. Pidió frenar ese contrabando y reforzar la vigilancia en la franja fronteriza. Del PAN, el diputado Jesús Guzmán Avilés convocó a atender los graves problemas que se avecinan para la agricultura y ganadería con la reducción presupuestal mayor a 31 por ciento para el año próximo respecto al presente. Pidió reasignar los recursos a rubros prioritarios como la sanidad, porque “de nada va a servir seguir entregando ganado, dinero o dádivas, es mejor garantizarles un empleo”. Propuso “hacer un cerco real para combatir el contrabando de ganado que ingresa por la frontera sur y el tráfico de aretes”; reasignar las partidas de importación de pollo, cerdo, bovino y ganado en pie para mantener precios justos a los productores, porque son los que dan empleo; “si quiebran los ganaderos, va a sufrir la gente más pobre que está en el campo”. Convocó a encontrar mecanismos viables con un enfoque diferente que impulse al sector. Del mismo grupo parlamentario, el legislador Miguel Alonso Riggs Baeza manifestó su preocupación por la disminución presupuestal destinada a la actividad agropecuaria. Sugirió reorientar los recursos asignados, dejar de lamentarse del pasado y fortalecer de raíz a la ganadería para apostarle a la sanidad, inocuidad, revisión y registro de animales, “hacer una limpia general del estatus sanitario” porque de nada sirve tener más animales infectados. De perder ese estándar se caería en una crisis en la producción cárnica del país que a nadie conviene. Planteó utilizar la tecnología para instalar en las reses un chip electrónico en lugar del arete que les dé seguimiento, ubicación y vigilar su origen, para abatir el abigeo e incrementar la vigilancia en ambas fronteras. Llamó a dejar filiaciones partidistas y trabajar por lo que le conviene a México. También del PAN, el diputado Mario Mata Carrasco consideró que el sector agropecuario está condenado a la muerte con el presupuesto más bajo presentado en los últimos 40 años, para 2020 se prevén alrededor de 46 mil millones. Si no hay dinero ¿cómo se va a impulsar el campo?, criticó la desaparición de los programas concurrentes. Explicó que Chihuahua ocupa el primer lugar en exportación de ganado en pie y quitarle recursos a la sanidad no abona a la producción de alimentos, cuando las naciones desarrolladas protegen a ese sector porque son el escudo que protege su seguridad alimentaria; sin embargo, sólo se apoya al autoconsumo sin alentar planes integrales que procuren más productos. Del PRI, el legislador Juan José Canul Pérez sostuvo que es criminal dejar sin atender la sanidad cuando productores e industriales arriesgan su capital para garantizar la obtención de alimentos de alta calidad, no sólo para sus familias, sino para venderlos en el mercado nacional. “Es un tema de salud, no de ocurrencias ni de discursos”. Demandó no quedarse con los brazos cruzados ni lamentarse por el pasado, sino apoyar al sector pecuario con mayores recursos. Pidió sensibilidad de sus pares para luchar por su presupuesto acorde a las necesidades de los productores. “Nos corresponde a los diputados fajarnos los pantalones y las faldas para hacer lo que esté a nuestro alcance para dotar de mejor presupuesto a la sanidad”. A nombre del Senasica, el director de Protección Sanitaria, Miguel Ángel Castillo Manga, reconoció que para ese organismo el presupuesto es vital, de no contar con recursos suficientes está en riesgo todo lo ganado en materia de control sanitario e inocuidad, porque ingresan divisas a México con las exportaciones del sector agropecuario, con carne, lácteos, pesquero y sanidad vegetal. La amenaza de la fiebre porcina africana es latente y se acaba de detectar en Filipinas, nueva nación invadida por falta de inspección. “Si nuestro país no aplica una verdadera inspección para salvarlo de esta enfermedad estamos fritos”. Tendencia que puede agravarse con la reducción adicional de 200 plazas laborales que se prevén, con lo que se han dejado de monitorear las granjas. “Se deben buscar fondos por debajo del agua para atender la vigilancia con oficiales capacitados en los aeropuertos donde llegan los vuelos de China, porque sus pasajeros transportan comida, así como en los puertos para salvaguardar la inocuidad de alimentos con binomios caninos. Se han incinerado dos y media toneladas de productos chinos y la basura de los barcos que atracan en las terminales marítimas. César Joel Quesada Macías, vicepresidente Pecuario del Consejo Nacional Agropecuario (CNA), presentó un diagnóstico del presupuesto en temas sanitarios, resaltó la reducción de 15.6 por ciento en sanidades e inocuidad agroalimentaria en el gasto del próximo año, respecto al 2019, los recursos son inferiores a los designados hace seis años, lo cual, disminuirá la capacidad de las autoridades para realizar esta vigilancia, alertó. Afirmó que la sanidad es un tema no negociable y debe considerarse como un bien público en beneficio de toda la población, además de que genera un significativo monto de divisas a través de las exportaciones agroalimentarias y cárnicas, necesarias para la economía nacional. Resaltó la necesidad de un fondo de aseguramiento pecuario para salvaguardar la inversión de productores, en particular los pequeños que carecen de recursos y tecnología. Juan Manuel Gutiérrez Martín, comisionado Avícola del CNA y presidente de la Unión Nacional de Avicultores, afirmó que es imprescindible un fondo de aseguramiento para el sector pecuario en su conjunto y frenar brotes de enfermedades, mediante una alerta temprana que evite una eventual propagación, y los productores puedan recibir una liquidación por los animales afectados o plantaciones, de lo contrario se quedan callados con el grave riesgo de diseminar el padecimiento. “Es vital contar con un fondo acompañado de vigilancia en la distribución y medidas de bioseguridad”. Solicitó a los diputados actualizar la cláusula de exclusión de extranjeros, establecida cuando la economía mexicana estaba cerrada, pero que ahora, debe alentar la producción de productos más sanos, ya que esas empresas trabajan e invierten en México, garantizan la autosuficiencia alimentaria y generan empleos en las zonas que más lo requieren. También del CNA, Heriberto Cárdenas Cárdenas, comisionado Porcícola, aseveró que asignar recursos a sanidad “no es un gasto, sino una inversión. Sin dinero no podemos hacer nada”. ¿De qué sirve tener funcionarios con grado académico de doctorado sin recursos?, preguntó e invitó a designar presupuesto suficiente. Denunció que falta inspección en aeropuertos y puertos nacionales para evitar el ingreso de productos contaminados, en particular de Asia. Indicó que México se encuentra entre los cinco países en el ámbito mundial, libres de las enfermedades más desastrosas que afectan a los animales, por ello, demandó no poner en riesgo el estatus sanitario y no escatimar recursos ni esfuerzos para minimizar los riesgos, en particular la fiebre porcina africana, cuya alerta apenas entró en vigor hace quince días. Ana Graciela Aguilar Antuñano, directora general de la Asociación Nacional de Ganaderos de Leche, aseveró que de la sanidad, inocuidad y certificación de la calidad de los alimentos depende que un país exporte al dar certidumbre, factores esenciales que no se han tomado en cuenta en México. Senasica tiene dos mil 500 empleados para realizar esa vigilancia, Estados Unidos en el Ministerio de Agricultura, más de cien mil trabajadores; Francia más de 35 mil y Japón más de 20 mil. “Si queremos ganar mercados y aprovechar los acuerdos comerciales firmados con el exterior necesitamos sistemas de sanidad, presupuesto y gente capacitada que permita la participación del país. No es posible que para certificar una planta nos tardemos dos años por falta de recursos y personal capacitado, de seguir así nos va a comer cualquier otro competidor”. Salvador Álvarez Mora, tesorero de la Confederación Nacional de Organizaciones Ganaderas, sostuvo: “no podemos dejar que termine la vigilancia sanitaria; se han logrado avances importantes y los esfuerzos de tantos años no pueden irse por la borda”. Demandó que conjuntamente los sectores identifiquen los males para solucionarlos. La ganadería, afirmó, está comprometida con la sanidad porque es la llave de acceso a los mercados mundiales; no obstante, expresó su preocupación por el recorte presupuestario. Lorena Delgado González, presidenta de la Coordinadora Nacional de Organizaciones de la Industria de Alimentos Balanceados para Animales (Conaal), manifestó su preocupación por la sustancial reducción presupuestal a la Secretaría de Agricultura, y en especial, al Senasica, que además ha disminuido su personal altamente calificado, cuya función primordial es controlar las importaciones cárnicas y garantizar que tengan calidad e inocuidad, lo que está en riesgo por falta de vigilancia en aeropuertos y puertos. “No contar con un presupuesto suficiente para Senasica es una alerta sanitaria, porque estaríamos susceptibles al ingreso de plagas y enfermedades. No debemos olvidar que la sanidad es fundamental para la productividad y competitividad del sector agroalimentario”. Convocó a dejar discursos, división y protagonismo político para trabajar conjuntamente. Pidió a los diputados tomar decisiones que coadyuven a la seguridad alimentaria con recursos suficientes. --ooOoo-- |