Es necesaria una reingeniería educativa en el Sistema Educativo Nacional que responda a las necesidades de miles de estudiantes y, sobre todo, garantice el derecho constitucional a la educación a todos los mexicanos por igual, señaló la diputada Julisa Mejía.

Al iniciar el nuevo ciclo escolar para 26 millones de estudiantes de educación básica, el censo de escuelas da por hecho que seis millones de ellos irán a planteles no adecuados para la enseñanza o en condiciones no propicias por falta de infraestructura mínima o de mobiliario escolar, comentó.

Indicó que la Secretaría de Educación Pública (SEP) fue una de las más beneficiadas con la reasignación de recursos por la Cámara de Diputados, ya que al presupuesto originalmente planteado por el gobierno se le sumaron dos mil 576 millones de pesos, para operar en 2014 con recursos por 292 mil 548.7 millones de pesos.

Además, señaló que de acuerdo a la ley el titular de Educación Pública preside la Junta de Gobierno del Instituto Nacional de la Infraestructura Física Educativa (INIFE), que se encarga de regularla en cuanto a construcción.

Asimismo, del equipamiento, mantenimiento, rehabilitación, reforzamiento, reconstrucción y habilitación de inmuebles e instalaciones destinados para escuelas en el país.

La norma establece, comentó, que “la Red Internacional de Educación Financiera (INIFE por sus siglas en inglés) deberá cumplir con las disposiciones de la ley general para la Inclusión de las Personas con Discapacidad y en la materia de las entidades federativas”.

Al tiempo de “garantizar la existencia de bebederos suficientes y con suministro continúo de agua potable en cada inmueble de uso escolar conforme a los lineamientos que emita la Secretaría de Salud en coordinación con la Secretaría de Educación Pública”.

Pero el panorama escolar, aclaró la secretaria de la Comisión de Puntos Constitucionales, no es el que la ley establece que debe garantizarse para que los estudiantes tengan una infraestructura educativa digna para todos.

Recordó que la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) desde el inicio del actual sexenio dio a conocer que el problema del país no es solo que aumente el gasto educativo que en 2014 tuvo un incremento de 6.7 por ciento.

Sino, abundó, en cómo se gastan estos recursos, porque de acuerdo a estudios en realidad este año se tuvo una disminución de 11.4 por ciento en términos reales, en gastos de inversión.

“Si la educación básica en México, hasta la media superior es obligatoria, es decir que los mexicanos estamos obligados a enviar a nuestros hijos a la escuela, a ¿dónde los enviaremos si la infraestructura educativa no permite garantizar el derecho constitucional a la educación?”

La legisladora del Partido de la Revolución Democrática (PRD), mencionó que muchas de las escuelas existen gracias a los esfuerzos de los padres de familia que aportan lo que pueden para que estas se construyan, se remodelen, funcionen y se mantengan en pie.

Hizo notar que de los alumnos de preescolar, primaria y secundaria que regresan a clase casi 100 mil lo harán a escuelas sin paredes ni techos, mientras que otros seis millones acudirán a planteles que se ubican en inmuebles adaptados.

Finalmente, comentó que el Censo de Escuelas, Maestros y Alumnos de Educación Básica y Especial detectó que 14 mil 444 escuelas no tienen pizarrones y otras 36 mil 628 no cuentan con un escritorio para el maestro. Duración 00’’, nbsg/m.