El aumento previsto en la producción petrolera a raíz de la reforma energética, requerirá más tiempo para convertirse en realidad, consideró el Centro de Estudios Sociales y de Opinión Pública (CESOP) de la Cámara de Diputados.

El investigador Gabriel Fernández Espejel explicó que esto se debe a que la plataforma de producción y exportación de crudo determinada para 2015 es inferior al promedio de años anteriores y se ubica por debajo de las expectativas creadas con las modificaciones constitucionales.

Apuntó que otro tema imprescindible, no sólo para el sector energético sino para la Ley de Ingresos de la Federación para el Ejercicio Fiscal de 2015, es el precio de referencia de la mezcla mexicana de crudo de exportación.

Por ello, el desembolso para la ejecución de las reformas estructurales es grande, precisamente por los requerimientos de inversión en infraestructura.

En su estudio “Presupuesto de Egresos de la Federación: el sector energético”, publicado por el CESOP, aborda el tema de energía a partir de los Criterios Generales de Política Económica y del Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación para el Ejercicio Fiscal de 2015.

Sobre el primer tema contempla las expectativas en torno a la producción de petróleo y de electricidad ante la reforma energética recién aprobada, y en el segundo, analiza algunas adecuaciones en el proyecto de presupuesto para que opere la reforma.

Además de que incorpora el pronóstico que hace Washington sobre estos temas frente a las nuevas leyes y sus modificaciones.

Expuso que la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) estableció en el proyecto de ley un valor de 82 dólares por barril (dpb) en línea con la tendencia internacional a la baja que prevalece desde 2012.

En este sentido, indicó, la Cámara de Diputados ante mayores presiones, decidió situarlo en 81 dólares en el dictamen de ley.

Sin embargo, al momento de la aprobación del Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) 2015, la cobertura autorizada por costo de barril fue de 79 dólares, de tal suerte que el gasto no corra riesgos ante la reducción en el precio del crudo.

El especialista dejó en claro que el precio de referencia parecía aún elevado; cuando se elaboró el paquete económico el 20 de agosto, el cierre fue de 91.2 dpb, mientras que al 15 de octubre, cuando se discutía la Ley de Ingresos, se ubicaba en 75.69 dpb.

Este comportamiento se inscribe en una tendencia de largo plazo, de acuerdo con organismos energéticos internacionales y obedece a la combinación del deterioro de pronósticos de crecimiento económico para 2015 y a incrementos en la producción de crudo, sobre todo, en Estados Unidos y Libia.

Consideró que el Presupuesto de Egresos y los Criterios Generales de 2015, dan cuenta del camino que recién emprende México para implementar la reforma energética.

Las expectativas de producción que menciona tienen una visión conservadora sobre sus alcances en el mediano plazo que el panorama de largo plazo considerado por la Energy Information Administration (EIA), resultando más alentador, enfatizó./arm/m