La presidenta de la Comisión de Asuntos Indígenas de la Cámara de Diputados, Eufrosina Cruz, advirtió que el proyecto de Ley General de Aguas que se encuentra en la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, incluye elementos inaceptables, como la entrega de concesiones a agentes privados. Lo anterior, para que sustraigan agua y presten servicio a la población, cuando existen comunidades indígenas que no tienen acceso al recurso hídrico, pese a que las zonas donde habitan si cuentan con agua, sentenció Cruz Mendoza. La legisladora del Partido Acción Nacional (PAN), dijo que por lo anterior y en respeto a los derechos de las comunidades indígenas, el Gobierno Federal debe eliminar la veda de agua en zonas indígenas del país, impuesta para trasladar el recurso a centros urbanos. “Hasta ahora la ley está detenida, porque se tienen que escuchar más voces, como los liderazgos de las comunidades, y saber qué tanto afecta de verdad. En el fondo, es privatizar. No es posible que las zonas en donde las comunidades son los dueños de los territorios, de las tierras, que se han dedicado a cuidar el recurso, son áreas vedadas, y resulta que no tienen agua sino que es para alimentar zonas urbanas”, sentenció. Recalcó que concesionar la explotación y distribución del recurso significa en términos reales privatizar un bien que al que por norma constitucional, deben acceder todos los mexicanos. Enfatizó que es preciso eliminar las restricciones de acceso al agua para algunas comunidades indígenas que lejos de derrochar el recurso, se han dedicado al cuidado de manantiales, ojos de agua y demás fuentes del recurso hídrico. De igual modo, insistió en pedir que las comisiones encargadas de dictaminar la Ley de Aguas revisen a fondo el proyecto e incluyan la opinión de expertos, académicos, científicos, organizaciones sociales, así como grupos y comunidades indígenas. Sentenció que al otorgar concesiones a empresarios, se corre el riesgo de que éstos fijen precios del agua a su conveniencia, lo que podría genera conflictos sociales en regiones donde el líquido es escaso y la necesidad apremia. “Me preocupa que pudiese generarse algún conflicto social en el país, porque no estamos para más conflictos; por lo tanto, se debe crear un mecanismo para que todas y todos los mexicanos cuidemos el agua, pero que sea de la nación, no concesionada”, planteó. ys/m. |