Diputadas federales de las ocho fracciones legislativas coincidieron en que abatir la violencia contra las mujeres, que afecta a más de la mitad de la población, requiere un esfuerzo conjunto de la población y todos los actores políticos.

Entre las condiciones más significativas que generan violencia contra esa parte de la población en diversas sociedades, tanto en escenarios públicos como privados, las legisladoras citaron a la discriminación, al abuso y a la desigualdad entre hombres y mujeres.

Las representantes populares plantearon que eliminar la violencia contra las mujeres es prioridad mundial y en México ha significado un compromiso por la equidad y el empoderamiento de ese sector a través del fortalecimiento de capacidades y una educación objetiva.

Asimismo, del decisivo respeto a su dignidad y a sus derechos mediante el Sistema Nacional para la Igualdad entre Mujeres y Hombres del Gobierno de la República.

Al fijar la postura del Partido Revolucionario Institucional (PRI) sobre el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, Laura Nereida Plascencia Pacheco, destacó la lucha de miles de mujeres que desde hace más de 20 años han sido parte fundamental del movimiento para reconocer sus derechos en Latinoamérica.

Subrayó que más de 60 por ciento de las mexicanas padece algún tipo de violencia y las más jóvenes, de entre 15 y 39 años, son las más afectadas.

Por eso, dijo, es importante destacar los esfuerzos del gobierno de la República para erradicar la violencia contra ellas a nivel nacional y “cuando se dice que no se ha hecho nada y que no se ha avanzado, en realidad es que no conocemos la información”.

Por el Partido Verde Ecologista de México (PVEM), la diputada Sara Paola Galico Félix Díaz externó que “la violencia contra la mujer es el acto más antinatural que puede existir” y que “atentar contra ellas es atentar contra la humanidad”.

Indicó que la parte más crítica del problema es que en su mayoría proviene del núcleo familiar y es producto de los roles de género y de concepciones culturales fuertemente arraigadas como el machismo.

En tribuna, María Eugenia Ocampo, de Nueva Alianza, señaló que a pesar de la legislación nacional e internacional para erradicarlo, ese fenómeno sigue siendo un común denominador a nivel nacional.

Refirió que de acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas (ONU), 35 por ciento de las mujeres y las niñas en el mundo padecen alguna forma de violencia física o sexual en el transcurso de su vida y que, incluso, en algunos países esa cifra llega hasta 70 por ciento.

En tanto, la diputada Ana Guadalupe Perea Santos, de Encuentro Social, expuso que a nivel global el acceso a la justicia para las mujeres que han sufrido violencia en muchos casos se ha visto paralizado por los prejuicios de género, estigmas sociales o mayormente por limitaciones financieras que no les permiten una defensa adecuada.

La perredista Maricela Contreras Julián externó en su oportunidad que la violencia de género es una cuestión de arraigo en la sociedad, donde la cultura y las instituciones observan como normal esa forma de vulneración de sus derechos y sus personas.

De su lado, Janette Ovando Reazola, del Partido Acción Nacional (PAN), señaló que son violentadas las mujeres del campo, las mujeres indígenas, “aún las mismas diputadas federales con violencia política, una violencia que ahora también tiene que ser hablada”.

La diputada María Candelaria Ochoa Ávalos, de Movimiento Ciudadano, alertó que cada día aumenta la violencia hacia las mujeres a pesar de que el sector representa a 52 por ciento de la población.

Por Morena habló Concepción Villa González, quien comentó que según la ONU al menos 70 por ciento de las mujeres en el mundo padece algún tipo de violencia en determinado momento de su vida. edo/m