El presidente de la Cámara de Diputados, Jesús Zambrano, se congratuló por la visita del Papa Francisco a México en los próximos días y llamó al gobierno federal a evitar cualquier intento de esconder la realidad del país.

"No se puede esconder el sol con un dedo o con escenografías", dijo el legislador, y advirtió que el recorrido del Jefe del Estado Vaticano por diversos estados y la Ciudad de México pondrá los ojos del mundo sobre nuestra nación.

Zambrano instó asimismo al presidente Enrique Peña Nieto a resguardar el carácter laico del Estado mexicano y mantener absoluta neutralidad durante la visita papal.

Remarcó que el artículo 40 constitucional deja muy claro que el Estado es garante de los derechos y libertades religiosas, pero en modo alguno puede ser parte para inculcar creencias a sus ciudadanos.

Recordó que en 2013, por primera vez en la historia de las relaciones bilaterales entre México y El Vaticano, un presidente (Enrique Peña Nieto) asistió a la ceremonia de entronización del Papa en San Pedro, y a su vez Francisco será el primer líder católico en ser recibido en Palacio Nacional.

Zambrano dijo que "nuestro Estado es laico, porque cumple con la libertad de conciencia; autonomía entre lo político y lo religioso; igualdad entre individuos y asociaciones ante la ley; y el respeto a la no discriminación por motivos religiosos: eso lo debemos tener muy presente quienes desempeñamos cargos públicos o tenemos representaciones populares, desde las funciones de gobierno o partidarias".

En un comunicado, el legislador del PRD confió en la sensibilidad del Papa Francisco, que, como latinoamericano, sabe de la problemática que compartimos México, Argentina y todos los países de la zona, de manera que su visita no debe ser sólo anecdótica.

Celebró, en ese sentido, las declaraciones del máximo jerarca de la Iglesia Católica, quien negó venir México "como Rey Mago, cargado de cosas para llevar mensajes, ideas y soluciones a problemas".

Zambrano subrayó así que la visita pastoral no debe dejar de lado asuntos importantes para miles de mexicanos en riesgo de perder sus empleos e ingresos por causa del encarecimiento del dólar y la caída de los precios del petróleo o aquellos que esperan justicia por sus familiares muertos o desaparecidos en medio de la ofensiva contra el crimen organizado.

Indicó que el Estado Mexicano debe a su vez trabajar no solo para quedar bien con el Papa Francisco, sino con el pueblo al que gobierna.

"En México tenemos problemas urgentes por atender, hay temas de primerísima importancia que estamos obligados a discutir en un ánimo constructivo. Es prioritario que nos reunamos para dialogar, porque la situación del país, de la gente, de los trabajadores, no puede aguantar más", sostuvo el diputado federal. edo/m